El día después de abofetear a Chris Rock en el escenario de la entrega de los Oscar, Will Smith pidió una disculpa al comediante, la Academia de Hollywood y los espectadores, diciendo que estuvo “fuera de lugar” y que sus acciones “no son representativas del hombre que quiero ser”. La crisis tras el incidente del domingo continuó el lunes cuando la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas condenó el ataque cometido por Smith en el escenario y dijo que comenzaría una investigación al respecto. Horas después Smith publicó una disculpa más sentida que la que dijo durante su discurso de agradecimiento, en el que notablemente no se disculpó con Rock.
“La violencia en todas sus formas es venenosa y destructiva”, expresó el actor. “Mi comportamiento en los premios de la Academia es inexcusable. Los chistes a costa mía son parte de mi trabajo, pero un chiste sobre la enfermedad de Jada (su esposa) fue demasiado para mí como para soportarlo y reaccioné emocionalmente. Me gustaría disculparme públicamente contigo, Chris. Estuve fuera de lugar y estuve mal. Estoy avergonzado por mis acciones que no son representativas del hombre que quiero ser. No hay lugar para la violencia en un mundo de amor y bondad”, recalcó.
Smith agregó disculpas también para la Academia, los productores, los asistentes a la ceremonia y la familia Williams. El actor fue premiado con el Oscar por su papel como Richard Williams, el padre de las famosas tenistas Venus y Serena en la película “Rey Richard”.
El lunes la Academia había señalado en un comunicado: “Condenamos las acciones del señor Smith en la ceremonia de anoche. Hemos comenzado oficialmente una investigación formal por el incidente y exploraremos más acciones y consecuencias de acuerdo con nuestras normas, estándares de conducta y la ley de California”.
Ayer Hollywood y el público continuaban tratando de comprender el momento que desconcertó al Teatro Dolby y a los telespectadores el domingo pasado. Smith subió al escenario después de que Rock hizo un chiste sobre el aspecto de Jada Pinkett Smith, la esposa del actor. Rock miró hacia Pinkett Smith y dijo: “Jada, te amo. «G.I. Jane 2», me muero de ganas de verla”. El chiste cayó mal. Pinkett Smith, quien tiene la cabeza rapada, ha hablado públicamente sobre su diagnóstico de alopecia (caída anormal del cabello).
jada.jpg
Will Smith y su esposa en la entrega de los Oscar.
Smith abofeteó a Rock en el escenario. De vuelta en su asiento, el actor le gritó dos veces al cómico: “Quita el nombre de mi esposa de tu puta boca. Sus palabras se escucharon claro en el Teatro Dolby, aunque la cadena ABC cortó el audio por unos 15 segundos en su transmisión. Una hora después, Smith ganó el premio a mejor actor. Durante su discurso de aceptación, se disculpó con la Academia.
“Habrá consecuencias”
Algunos miembros de la Academia, como el guionista Marshall Herskovitz, pidieron que la organización emprendiera acciones disciplinarias contra Smith. “Deshonró a nuestra comunidad entera”, escribió Herskovitz en Twitter. Whoopi Goldberg, miembro de la junta de gobernadores de la Academia, dijo en el programa “The View”: “No le vamos a quitar ese Oscar. Pero habrá consecuencias, estoy segura”.
El Sindicato de Actores (SAG por sus siglas en inglés) también se pronunció al respecto y calificó el incidente como “inaceptable”, señalando que la “violencia o abuso físico en los lugares de trabajo nunca son aceptables”. El SAG dijo que había estado en contacto con la Academia y con ABC, y agregó que no hace comentarios sobre los propios procesos disciplinarios.
Algunos cuestionaron si debieron permitir a Smith permanecer en su asiento en primera fila tras golpear a Rock. Varias estrellas se acercaron para tratar de calmarlo y darle consejos, incluyendo a Denzel Washington, Bradley Cooper y Tyler Perry. Pero el momento en el que ocurrió hizo que todo fuera más raro, porque la categoría de mejor actor se entregaba poco después y desde hacía tiempo Smith era considerado favorito para ganar.
El chiste que provocó a Smith no era parte de la rutina que Rock había ensayado, según dos fuentes cercanas a la producción que no estaban autorizadas para hablar públicamente.