La jueza federal porteña María Servini se opuso duramente ayer en un escrito a la extradición a Estados Unidos del supuesto narcotraficante Ibar Pérez Corradi, que había firmado su colega de San Isidro Sandra Arroyo Salgado, y envió un oficio a la canciller Susana Malcorra para informarle de su opinión.
Servini cuestionó ferozmente a Arroyo Salgado: "No deja de sorprender a esta magistrada los términos, poco frecuentes, que emplea la titular del Juzgado Federal Nº1 de San Isidro para dirigirse a un par; más considerando que hace ya un mes y medio que este juzgado extraditó a Pérez Corradi, con lo que contó con sobrado tiempo como para requerirme que «de inmediato» anote a disposición conjunta al detenido Ibar Pérez Corradi".
Y advirtió: "¿Cuál sería el apuro o la urgencia inminente para disponer la entrega provisoria de Pérez Corradi a las autoridades judiciales de Estados Unidos" si estas "no han insistido, ni reclamado, la urgente extradición de Pérez Corradi que la titular del Juzgado Federal Nº1 de San Isidro ahora pretende?".
"No necesita esta magistrada que nadie le enseñe a garantizar los derechos de los justiciables o la manera de llevar adelante complejas investigaciones de narcotráfico y su relación con uno de los más complejos y planeados crímenes múltiples que se registren en nuestro país", disparó Servini en referencia al triple crimen de General Rodríguez, cuya autoría intelectual se atribuye a Pérez Corradi.
Después de casi cuatro años prófugo, Pérez Corradi fue detenido en junio pasado en Paraguay y, a instancias de Servini, fue extraditado al país el pasado 5 de julio, en medio de un gran operativo de seguridad.
Servini había requerido la extradición en el marco de la causa que investiga el ingreso al país de toneladas de efedrina y su vinculación con el triple crimen.
También el juez federal Sebastián Casanello investiga a Pérez Corradi por lavado en la causa "mafia de los medicamentos".
Pero Arroyo Salgado tramitaba un pedido de extradición de los EEUU, donde se lo investiga por haber enviado a ese país un sobre que contenía pastillas de oxicodona, una sustancia derivada del opio.
Precisamente por eso Arroyo Salgado firmó una resolución en donde dispuso la "correspondiente entrega provisoria" de Pérez Corradi "a las autoridades judiciales de EEUU que lo han requerido" y pidió como condición que "permanezca privado de su libertad hasta el reintegro a nuestro país en un establecimiento carcelario de máxima seguridad".
Servini se opuso a esa decisión y advirtió que el envío de Pérez Corradi a los EEUU es una facultad exclusiva del Poder Ejecutivo, tras lo cual recordó que el detenido tiene dos causas abiertas en Argentina por delitos que tienen una escala penal mayor a la que podría imponerle EEUU.
"En torno al momento en que la colega escoge adoptar el decisorio que motiva el presente, debo decir que resulta curiosa la preponderancia que pareciera otorgarle la magistrada a autoridades judiciales extranjeras, a las que, a diferencia de las locales, no le corren plazos procesales para la prescripción de su investigación", remarcó.
La jueza envió el oficio al Palacio San Martín "a fin de poner en conocimiento de la Cancillería las severas dificultades para la prosecución de esta investigación que conllevarían hacer lugar a la entrega de Pérez Corradi a EEUU".