"Señor presidente, Rosario está presente". Treinta minutos después de la hora convocada, a las 18, una multitud de más de 5.000 personas que se congregó en el Monumento a la Bandera mandó un mensaje inequívoco sobre la verdadera razón que los reunió detrás de la consigna "Marcha por la democracia". Fue una manifestación, importante por su número y por la forma en que se organizó, en respaldo al gobierno que encabeza Mauricio Macri.
Enfundados en la bandera argentina o blandiéndolas al viento, los manifestantes corearon consignas, al principio neutras ("Viva la democracia", "Argentina, Argentina"), pero que poco a poco fueron mutando con gritos explícitos de apoyo hacia Macri. Y por contraste, también hacia los sectores que ellos creen que quieren desestabilizar al gobierno, focalizado sobre todo en el sindicalismo.
La conformación social de los manifestantes fue, básicamente, de clase media, el mismo sector que nutrió de votos a Cambiemos para arribar al poder. También hubo una fotografía casi idéntica a las marchas contra Cristina Kirchner, como la del 8N en 2012. Sin embargo, en este 1A no hubo carteles insultantes contra la ex presidenta, aunque siempre sobrevoló un clima bien antikirchnerista en el voceo de la multitud. "No vuelven más" o "no más paro", identificando la huelga docente o el paro de la CGT del próximo jueves como intentos desestabilizadores de sectores que se referenciaron en el gobierno anterior.
"Me gustan los gatos que corren a las ratas, por eso apoyo a este gobierno", portaba un cartel bien en alto una señora, haciendo alusión a la rótulo de "Macri gato" que le colocaron los kirchneristas al presidente.
Cerca de las 19, las consignas anárquicas lanzadas al aire se unificaron en una sola: "Argentina unida, jamás será vencida", para luego dar paso al canto del Himno Nacional, cantado a viva voz por los presentes.
Entre la multitud se pudo ver también a algunos políticos locales de Cambiemos, pero prefirieron el segundo plano, sin hacer declaraciones a la prensa, para dejar en claro que el protagonista era "la gente espontáneamente autoconvocada". Por entre el gentío se mezclaron Jorge Boasso, Carlos Castellani, Agapito Blanco, Lucas Incicco, entre otros dirigentes que se declararon "emocionados y sorprendidos" por el nivel de la convocatoria.
Marta, una jubilada que dice cobrar el haber mínimo, apenas divisó a la prensa, se acercó y aportó su reflexión: "Si hubiésemos salido cuando los peronistas le hacían la vida imposible a Alfonsín, a lo mejor otra hubiera sido la historia".
embanderados. La multitud copó el Monumento para respaldar al gobierno de Cambiemos.