Un hombre de 48 años fue asesinado de una puñalada al trabarse en lucha con otros cuatro sujetos, entre los que estaba quien supuestamente había asaltado a su hija unos días atrás. La policía detuvo a los cuatro sospechosos, uno de los cuales permanece internado porque sufrió heridas de arma blanca en la pelea.
El crimen sucedió en Lima al 2700, en la zona oeste de Rosario, y según las primeras informaciones todo habría ocurrido en torno a un probable reclamo que la víctima habrìa hecho por el robo que sufrió su hija.
El homicidio número 207 en lo que va del año en el departamento Rosario se registró este jueves, poco después de la medianoche. Fuentes del Ministerio Público de la Acusación indicaron que todo sucedió cuando Eduardo Luis Herrera mantuvo una discusión con cuatro hombres: H.S., de 54 años; M.B, de 34; M.R., de 24 y R.G, de 33.
La versión de Fiscalía indica que Herrera fue agredido de gravedad a puñaladas y murió en el lugar. Los cuatro supuestos agresores fueron detenidos poco después por la policía. Uno de ellos, H.S. fue trasladado al Hospital de Emergencias donde permanece estado reservado.
El fiscal interviniente, Patricio Saldutti, ordenó el relevamiento de la escena del homicidio y otras medidas a cargo de la División Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal.
Violenta víspera de Navidad
Rosario vive una víspera de Navidad con mucha violencia. Horas después de que se produjera la muerte de Herrera, en Villa Gobernador Gálvez dos hombres fueron ultimados a balazos. Las víctimas de ese doble homicidio fueron identificadas como Brian Nicolás Zapata, de 27 años, y Lucas Gabriel Sandoval, de 24. Los primeros informes indican que fueron sorprendidos por dos o tres sujetos que irrumpieron en la casa ubicada en Montevideo al 3300 y los acribillaron. Por este episodio aún no hay sospechosos identificados.
Además, esta semana la ciudad se conmovió con el caso de Jorge David Giménez y Víctor Martín Baralis. Ambos fueron asesinados y descuartizados, y las partes de los cuerpos fueron depositados dos en contenedores de residuos y cerca del arroyo Saladillo, en la zona sur de Rosario. En este caso, los investigadores sospechan que el atroz hecho habría sido planeado desde la cárcel de Piñero, donde está alojado el líder de una banda conocida como Los Gorditos.