En un juicio abreviado fueron condenados este viernes Agustín Saravia y Juan José "Mono" Chaperón por una serie de ataques armados en los que resultó asesinado Axel Agustín Rivas, el 27 de agosto de 2019 en inmediaciones de los barrios La Lagunita y Toba sudoeste, y resultaron heridas otras 3 personas. Saravia acordó una pena de 12 años de prisión y Chaperón una sentencia de 12 años y 2 meses que, unificada con una condena anterior, quedó en una pena única de 15 años y 3 meses de cárcel. Los Jueces de primera Instancia Gustavo Pérez Urrechu, Román Lanzón y Carlos Leiva homologaron el acuerdo de partes presentado por la fiscal Georgina Pairola y la defensa de los condenados.
Según la acusación, la medianoche del 27 de agosto de 2019 en inmediaciones del Pasaje 1878 (Campbell) al 3800 Saravia y Chaperón, quienes circulaban en moto, atacaron a balazos a dos hombres. Saravia conducía la moto y Chaperón era el acompañante. Las dos personas resultaron heridas de bala, uno en la pelvis y el otro en la pierna derecha. Las heridas motivaron que ambos terminaran en el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez.
Dos días más tarde, el 29 de agosto de hace dos años, hubo una balacera fatal en Pasaje 1872 al 3600. Alrededor de las 22.15 Axel Agustín “Sombra” Rivas conversaba allí con su amigo Santiago Gabriel Leguizamón y desde un Volkswagen Gol rojo los rociaron a tiros. Rivas recibió varios balazos, uno en el tórax, e ingresó al Hospital de Emergencias con un paro cardiorrespiratorio y murió por una hemorragia cardiopulmonar. En el lugar se secuestraron alrededor de diez vainas calibre 9 milímetros.
Leguizamón, de 22 años, quedó internado en estado delicado con pronóstico reservado y con un balazo en el abdomen. Su hermano lo llevó al hospital en su auto, un Fiat Duna sobre el cual estaban recostadas las víctimas cuando las atacaron y que también resultó perforado por tres balazos. Para la acusación Chaperón era quien efectuó los disparos. Tras el ataque, un grupo de vecinos incendió la casa donde residía uno de los supuestos homicidas.
La fiscal Pairola acusó a Chaperón, de 23 años, por los delitos de encubrimiento en carácter de autor, tentativa de homicidio agravado por haber sido cometido con empleo de arma de fuego, lesiones leves agravadas por empleo de arma de fuego de guerra, portación ilegítima de arma de fuego de guerra, homicidio agravado por uso de arma de fuego, tentativa de homicidio agravado por uso de arma de fuego, portación de arma de fuego. Además se le imputó a Chaperón haber adquirido y/o recibido con conocimiento de su procedencia ilícita una moto Yamaha Crypton con pedido de captura por haber sido robada el 27 de diciembre de 2016 bulevar Seguí y Campbell el 31 de enero de 2017. La pena propuesta para el proceso abreviado fue de 12 años y 2 meses que se unificó con una sentencia anterior que Mono tenía a 3 años y 4 meses de prisión del Juzgado de Menores número 4. La pena unificada quedó en 15 años y 3 meses.
Por su parte la fiscal imputó a Saravia, de 22 años, como autor de los delitos de tentativa de homicidio agravado por haber sido cometido por uso de arma de fuego, lesiones leves agravadas por empleo de arma de fuego, homicidio agravado por uso de arma de fuego y tentativa de homicidio agravado por uso de arma de fuego. La pena acordada por la partes fue de 12 años de prisión. Los jueces Pérez de Urrechu, Lanzón y Leiva homologaron el acuerdo de partes.