Un camionero oriundo de la provincia de Mendoza hirió de gravedad a un ladrón al que le disparó con un arma de fuego tras resistir un robo en avenida Presidente Perón al 6900, donde se hallaba estacionado a la espera de un pago. Mientras que la persona herida permanece internada en estado delicado en el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez (Heca), la Fiscalía Regional informó que el chofer será imputado hoy en una audiencia en los Tribunales provinciales.
Un hecho de inseguridad urbana enfrentó el martes a la tarde a las dos caras que impregnan la problemática que más afecta a los rosarinos: un trabajador y dos delincuentes, que al parecer salieron en busca de víctimas al boleo, pero en este caso sin reparar que podrían acarrear consecuencias inesperadas.
Todos se desencadenó imprevistamente alrededor de las 19.30 del martes mientras se aplacaba lentamente la actividad del trajinar constante de los vehículos que entran y salen de los galpones, distribuidoras y pequeños emprendimientos fabriles que se extienden en esa franja del extremo oeste de Rosario.
Mario Enrique A., el chofer de 57 años oriundo de Mendoza, estacionó el camión frontal Iveco color blanco con la caja y el acoplado vacíos en avenida Presidente Perón 6975, sobre la mano sur que conduce al centro de Rosario. "Hacía rato que estaba allí y este lugar es complicado porque estamos rodeados de villas", refrescaron los trabajadores de la estación de servicio Puma ubicada a pocos metros de allí, en la intersección de Presidente Perón y la colectora de Circunvalación.
Tal vez el hombre no intuyó o subestimó el riesgo de andar expuesto en esa zona cuando empieza a caer el sol. Lo cierto es que mientras esperaba sentado en su butaca de conductor, justo frente a la distribuidora de golosinas Tyna (en la vereda sur hay un descampado), dos desconocidos llegaron desde atrás a bordo de una moto y se detuvieron a la altura de su ventanilla .
"Uno se bajó con un revólver en la mano y le pasó por delante de la trompa, como para entrar por la puerta del acompañante. Cuando el chofer vio que uno estaba con un revólver sacó un arma y le disparó al que todavía estaba en la moto y el tipo se derrumbó sobre el pavimento. Todavía hay un charco enorme de sangre", graficó a este diario un ocasional testigo del hecho.
Escape a la carrera
La misma persona indicó que cuando se desató la inesperada reacción de quien en principio iba a ser víctima de un robo, el segundo delincuente reculó, dejó abandonado a su compinche y salió corriendo por la vereda blandiendo el arma y en dirección al oeste, para perderse al sur por la colectora del primer anillo vial de la ciudad.
"Se escucharon dos o tres detonaciones, pero no sé si las hizo el camionero o el cómplice que se asustó y disparó al aire mientras huía. Ahí quedaron al menos dos vainas servidas, una era de un 38 creo, y la otra de una 9 milímetros, pero no estoy seguro", narró otro vecino.
Después se generó una ventana de tiempo de la cual no hay referencia. El hombre herido quedó tendido en medio del pavimento, empapado en un charco de sangre y con la moto a su lado. A los pocos minutos intervino personal de un móvil de Gendarmería Nacional que retuvo al chofer y más tarde otros patrulleros de Comando Radioeléctrico y de la comisaría 32ª que convocaron a los médicos del Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (Sies).
El joven herido, identificado como Jorge Damián C., de 27 años, fue trasladado al Hospital de Emergencias donde al cierre de esta edición permanecía internado en grave estado. Según el informe médico el proyectil le ingresó por la zona lumbosacra y le salió por el abdomen provocándole heridas internas que lo mantienen en la sala de terapia intensiva.
Imputación
Mientras en el lugar ayer sólo quedaba el vestigio seco de la sangre y los guantes manchados de los médicos policiales (mala costumbre que se registra en cada escenario de un hecho de sangre), desde Fiscalía Regional se aportó que el camionero "utilizó una pistola marca Glock calibre 40 que tendría el certificado de usuario legítimo".
En el caso tomó intervención el fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos, Ademar Bianchini, quien ordenó las medidas de rigor al Gabinete Criminalístico de la Policía de Investigaciones (PDI) y dispuso la detención preventiva de Mario Enrique A., que hoy sera sometido a una audiencia imputativa con horario a confirmar.
Desde el Ministerio Público de la Acusación (MPA) indicaron que la calificación y el encuadre legal "se reserva hasta el momento de la audiencia, ya que se esperan resultados de medidas ordenadas por el fiscal". Mientras tanto, el camión Iveco y la moto marca Storn color negra quedaron bajo custodia judicial en la comisaría 32ª de Colombres y Vanzo, en el barrio Godoy.