No se come el personaje de jugador titular. Tampoco se instala y queda panza arriba por saber que no cuenta con un competidor directo. Maximiliano González se ganó el puesto en la combativa zona de los volantes a fuerza de trabajo y buenos rendimientos. Hoy es el 5 de Central indiscutido. No obstante, opta por no relajarse en la zona de confort y apunta "a seguir mejorando día a día para dar lo mejor al equipo". También admitió que buscará cerrar la temporada "afianzándome entre los titulares. Claro que para eso tengo que seguir rindiendo como el semestre pasado". Además, destacó que a nivel colectivo "les daremos batalla a todos", en una charla a fondo con Ovación.
Sí, creo que es así. Me voy sintiendo cada vez mejor, por suerte. Además, el hecho de que ya pasó lo más duro de la pretemporada también hace que me vaya aflojando cada vez.
¿Te cambió en algo el hecho de que en los dos partidos que hicieron te tocó jugar un rato con Ortigoza y otro con Gil?
No me cambió, pero sí son dos jugadores de características diferentes. Uno es más de jugar y el otro más dinámico. Hay que ir adaptándose para que cada uno esté más cómodo en el lugar que le toque estar. En lo personal, trato de hacer lo que me pide el entrenador y charlar con mis compañeros a la hora de hacer determinados movimientos.
¿Qué significa saber que sos el volante central titular?
Trato de no verlo así porque en esto tenés que demostrar en cada práctica que estás para jugar. Por eso entreno y dejo todo en cada entrenamiento. Lo tomo como que peleo el puesto siempre. Si me toca estar busco devolver de la mejor manera esa confianza. Además, soy uno más del plantel.
Pero convengamos que no tenés reemplazante ni competidor directo hoy en día.
Igual uno no tiene que pensar en eso porque si afloja un poco lo comen. Alguien terminará jugando si bajo el nivel. Hay muchos compañeros que quieren jugar.
¿Es una presión extra entonces saber que todo depende de vos?
No hay que pensar en eso. Hay que entrenar y dejar todo en cada partido. Si te metés esa presión, por ahí te hacés la cabeza y es peor. Trato de estar tranquilo y que las cosas se vayan dando solas.
¿Qué podés decir de tu rol?
Que busco dar una mano en defensa cuando es necesario e intento recuperar las pelotas en el medio. Trato de jugar simple. Soy el que más defiende en la zona por las características que tengo.
¿Te sentís más cómodo con un doble cinco o jugando con el denominado rombo en el mediocampo?
Como venga. La idea es que en ambos casos me quede más defendiendo. Es cuestión de adaptarse a lo que pida el entrenador y cumplir con la función designada.
¿Qué notás que te falta mejorar?
Siempre hay cosas por mejorar. No me quedo conforme con lo que hago. Hay que superarse día a día. Para esto entreno también.
Pero el jugador sabe qué le falta puntualmente.
Puede ser, pero no pienso en eso. Trato de corregir las cosas que veo que puedo mejorar a medida que vayan surgiendo.
¿Y sos de analizar a los rivales o ver fútbol, que es algo que la nueva camada no hace?
Sí, intento además ver un poco de todo. Hay que conocer a los rivales y tratar de sacar los movimientos que hacen.
¿Tenés algún referente en el puesto?
No, tomo algo de cada uno. De todos se aprende.
¿En cuánto te ayudó el paso por Quilmes? Porque muchos no valoran en qué club están, pero lo ven cuando deben irse.
Es verdad eso. También me sirvió para sumar minutos, que por eso decidí ir allá en su momento. Por suerte jugué y ese rodaje me vino bien. Ahora hay que demostrar acá, pero por suerte se está haciendo un gran trabajo en líneas generales.
¿La meta es que este sea el año de tu consolidación?
Sí, creo que sí. Tengo que seguir rindiendo como el semestre pasado.
¿La clave fue que supiste aprovechar la oportunidad?
Por supuesto. Pero a la vez, cuando uno está con confianza y tiene el apoyo de todos, las cosas salen solas.
¿Cómo llegan al inicio del torneo?
Bien. Estamos muy metidos esperando el reinicio. El grupo está muy bien y con muchas ganas de hacer un buen torneo.
¿Toman como un plus que mantienen la base del equipo?
Es algo bueno porque nos conocemos muy bien. Claro que los que entran también hace que no se resienta el equipo. Todo lo contrario. Hay un nivel parejo en ese sentido.
¿Saben que ahora se viene el momento de ratificar lo que hicieron en los últimos tres partidos oficiales?
Sí, sabemos que no arrancamos bien el torneo pero lo terminamos muy bien. Por eso buscaremos seguir de esa manera y tratar de dejar bien parado a Central al final de la competencia.
Además la gente exigirá que estén más arriba de la tabla.
Por supuesto. No hay que bajar la imagen que dejamos como el ritmo que mostramos en las últimas fechas. Estaremos bien, no tengo dudas.
¿Una de las bases es que volvieron a ser muy intensos?
Sí, es así. Se vio que somos intensos y a los equipos les costó aguantarnos el ritmo.
Tienen un semestre complejo porque además de la Superliga deberán jugar las copas Sudamericana y Argentina, que son a simple eliminación.
Será apretado el semestre pero nos preparamos para encarar todo lo que viene. Y les vamos a dar pelea a todos.