El 3 a 0 de Barcelona a Real Madrid tuvo un responsable: el uruguayo Luis Suárez. Esta vez no fue el rosarino Lionel Messi sino el goleador quien apareció en su esplendor para con dos conquistas y presionando en la restante, en la que el francés Varane la empujó hacia su propio arco, convertirse en la figura del juego. Un triunfo de visitante, que sumado al 1-1 en el choque de ida, le dio al Barsa la clasificación a la final de la Copa del Rey por sexta vez consecutiva.
El estadio Santiago Bernabéu se había vestido para fiesta merengue, pero los dirigidos por el rosarino Santiago Solari no supieron embocarla en el arco defendido por Ter Stegen en un primer tiempo en el que merecieron finalizar ganadores. Tampoco consiguieron pegar un grito antes de que lo hiciera el uruguayo Suárez a los 50', de que llegara el segundo a los 69' y el del uruguayo otra vez en el minuto 73, cuando se atrevió a picar el penal del 3 a 0.
El Real fue superior desde el arranque con una gran actuación del juvenil atacante brasileño Vinicius Jr., aunque no logró convertir ninguna de las que generó por falta de puntería y por las intervenciones monumentales del arquero Ter Stegen.
Y las que se pierden en un arco, generalmente entran en el contrario y así sucedió en la etapa final. Barcelona capitalizó el cero y a los 5' el uruguayo Suárez definió rasante frente a Navas al conectar un centro del francés Dembélé.
El segundo llegó poco después, cuando Varane trató de interceptar un centro del mismo Dembélé a Suárez y terminó enviando la pelota contra su arco.
Y no pasó mucho tiempo para que Suárez completara su obra al ejecutar un penal cedido por su amigo Messi (estuvo lejos del gol), luego que al uruguayo lo bajara el brasileño Casemiro.
Ahora los catalanes irán por un quinto título seguido de la Copa del Rey, algo sin precedentes, en la final que se jugará el 25 de mayo en Sevilla frente al vencedor de Valencia-Betis.
A Real Madrid (no gana este trofeo desde 2014) sólo le queda tratar de bajar al Barsa el sábado cuando vuelvan a enfrentarse, esta vez por la liga española y en el mismo escenario de ayer. Igual, está tercero 9 puntos abajo en las posiciones (el escolta es Atlético de Madrid a 7) y sólo asoma como un milagro que impida el título del equipo de Messi y Suárez a 13 fechas del final. Deberá mirar por TV si Suárez sigue afilado con el gol en la final o si le pasa la posta al rosarino.
"Es un golpe duro", reconoció Solari
"El fútbol también es contundencia. Estuvimos aplicados, con energía, pero no fuimos contundentes. Caímos con honor pero estamos tristes porque es un golpe duro", señaló el entrenador rosarino Santiago Solari. "Esperemos que entren todas las que no entraron hoy en el partido de Liga del domingo", agregó.