Platense hizo historia. Nunca había llegado a una final. Y lo consiguió en una deslucida y sufrida semifinal de la Copa de la Liga que le ganó a Godoy Cruz por 6 a 5 en la definición de los penales, tras igualar 1 a 1 en los 90’, en el Estadio Único de San Nicolás. El gran héroe del calamar fue el arquero Ramiro Macagno, cuyo pase pertenece a Newell’s, adonde tendrá que volver a partir del 1º de enero, atajando cuatro de los diez penales que le patearon.
Macagno fue clave para meter al calamar en la primera final de su historia, compartiendo este logro con otro futbolista del club del Parque, Jerónimo Cacciabue, y uno que pertenece a Central, Pupi Ferreira, quienes ingresaron en la segunda etapa y podrían haber tenido un papel más relevante. Ambos tuvieron la victoria en sus pies en la tanda de los penales, pero Ferreira la tiró por encima del travesaño y a Cacciabue se lo detuvo el Ruso Rodríguez. Para alivio de ellos estaba Macagno y sus acertadas intervenciones.
En la primera semifinal de este sábado predominaron los nervios y la preocupación por no cometer ningún error que les costara caro. Godoy Cruz, por antecedentes y plantel, era el favorito, pero nunca consiguió plasmarlo en la cancha. Y fue Platense el que se puso en ventaja. Raúl Lozano la peleó sobre la banda izquierda, Lucas Ocampo la recibió y metió el centro bajo que el paraguayo Ronaldo Martínez impactó de derecha para introducirla fuera del alcance del exCentral, el Ruso Rodríguez.
No se demoró demasiado el Tomba para llegar a la igualdad. El chileno Thomas Galdames sacó el centro, Tomás Conechny ganó de arriba, rebotó en un defensor y le quedó a Salomón Rodríguez, que solo la tuvo que tocar a un costado de Macagno.
image (37).png
Pellegrino, Castro y el Pupi Ferreyra celebran alborozados la victoria de Platense en San Nicolás. No aparece en primer plano Macagno, héroe calamar.
La segunda parte fue carente de atractivos. Godoy Cruz asumió la iniciativa y Platense esperó agazapado para sacar la contra. Ni un planteo ni otro sirvió para que alguno dominara el desarrollo del juego y se aproximase con peligro.
Recién cuando el partido se acercaba al último cuarto de hora hubo una situación de gol, favorable a Platense. Nicolás Castro la paró afuera del área y sacó un zurdazo que contuvo Diego Rodríguez.
De inmediato fue Roberto Fernández, de Godoy Cruz, el que probó desde media distancia y Macagno la detuvo en dos tiempos.
No extrañó entonces, ante tanta falta de peso ofensivo que hubiera que definir en los penales y fue allí que emergió la figura de Macagno.
Las formaciones:
Godoy Cruz: Diego Rodríguez; Lucas Arce, Pier Barrios, Federico Rasmussen y Thomas Galdames; Nicolás Fernández, Cristian Núñez, Hernán López Muñoz y Tomás Conechny; Tadeo Allende y Salomón Rodríguez (67' Enzo Larrosa). DT: Daniel Oldrá.
Platense: Ramiro Macagno; Nicolás Morgantini, Ignacio Vázquez, Gastón Suso y Raúl Lozano; Facundo Russo (67' Ciro Rius), Franco Díaz, Nicolás Castro (74' Luciano Ferreyra), Lucas Ocampo (85' Jerónimo Cacciabue); Mateo Pellegrino y Ronaldo Martínez (67' Leonel Picco). DT: Martín Palermo.
Penales: Para Godoy Cruz convirtieron Diego Rodríguez, Conechny, López Muñoz, Arce y Barrios. Macagno le atajó a Larrosa, Fernández, Galdames y Rasmussen. Allende desvió. Para Platense señalaron Pellegrino, Suso, Franco Díaz, Morgantini, Vázquez y Lozano. Rodríguez le atajó a Picco y Cacciabue. Ferreira y Rius desviaron.
La primera semifinal se le escapó
Platense esta vez sí supero una semifinal, a diferencia de lo sucedido 56 años atrás, cuando se le escapó en forma insólita. El calamar, conducido por Ángel Labruna, con el rosarino Gualberto Muggione y Carlos Bulla, de Oliveros, vencía en el Metro 67 por 3 a 1 a Estudiantes, que jugaba con 10 por lesión de uno de sus futbolistas. Bulla había señalado dos goles y Lavezzi el otro. Pero el pincha, dirigido por Osvaldo Zubeldía, lo dio vuelta y le ganó por 4 a 3, con los tantos de Conigliaro, Verón, Bilardo y Madero, de penal. Así el calamar se quedó sin final.