Newell’s va por más. La dirigencia leprosa está abocada de lleno al presente deportivo en el que la prioridad es recomponer el promedio, pero igualmente no deja de proyectar el futuro institucional y allí el 2020 podría tener una gran noticia para el pueblo rojinegro. Porque si el equipo de Frank Darío Kudelka cumple con el objetivo de lograr la permanencia y además se realiza la transferencia importante de algún futbolista, la intención del oficialismo es que a mitad del año que viene comience la construcción de la segunda bandeja del Palomar, en lo que sería el primer paso de la remodelación integral del Coloso Marcelo Bielsa.
Incluso el proyecto del nuevo estadio ya está confeccionado e incluye también para el futuro una edificación de palcos sobre la visera Tata Martino. Claro que en esta determinación no puede soslayarse el hecho de que el año que viene habrá elecciones en el Parque allá por el mes de diciembre y la actual dirigencia tiene en mente presentarse en la contienda electoral.
Así Newell’s ya tiene un proyecto de reforma integral del Coloso, que de concretarse en plenitud dotaría al estadio de un aspecto imponente en el corazón del parque Independencia. Hasta lo convertiría en un escenario tentador para, por ejemplo, ser sede de partidos de la selección argentina.
Igualmente desde la dirigencia saben que la prioridad ineludible es lograr los objetivos deportivos propuestos para esta temporada, como son zafar de la zona roja de los promedios y hasta aspirar a clasificar a alguna copa internacional. Esta misión no es sencilla, pero por ahora la campaña va por los carriles lógicos y con una cosecha de puntos satisfactoria (21 unidades en doce fechas jugadas).
Pero a la par de lo deportivo la actual comisión proyecta el futuro cercano. Y en este sentido se reflotó la idea de ampliar y refaccionar el Coloso. Por ello la dirigencia ya tiene el boceto del nuevo Marcelo Bielsa, que en la imagen digital tiene un aspecto impactante. Pero lo más trascendente es que el primer paso podría ser a mediados del año que viene, con la puesta en marcha de la segunda bandeja del Palomar, que además podría estar culminada para fines del año que viene.
Esta ampliación de la cabecera del Palomar sería la primera etapa de la remodelación integral del estadio, que además contaría con una edificación de palcos sobre la visera Gerardo Martino.
Si bien desde la dirigencia leprosa reafirman una y otra vez que lo deportivo y el recomponer el promedio son las grandes prioridades para el presente de Newell’s, también se animan a mirar un poco más allá y proyectan poner manos a la obra en un emprendimiento que podría cambiar sustancialmente el aspecto del estadio rojinegro. Así, si los resultados acompañan y se logra una venta de algún jugador de la cantera, se encendería la luz verde para que desde mediados de año el Coloso sea aún más Coloso.
Demás está decir que a fin del año que viene habrá elecciones en el club del Parque y la puesta en marcha de esta megaobra, al menos en su primer paso, sería una apuesta fuerte del oficialismo en busca de seguir conduciendo los destinos del club.
Porque Newell’s contaría con un estadio moderno y acorde a los nuevos tiempos, pero también deberá terminar de saldar el fideicomiso judicial y, lo más importante, seguir creciendo en lo futbolístico desde las inferiores a la primera división, que es el principal leitmotiv de la entidad rojinegra.
En consecuencia, desde mediados del año que viene podría haber novedades edilicias en el Coloso. La obra de la cabecera del Palomar permitiría mayores comodidades para los hinchas y ampliaría la capacidad del estadio. Luego sería el turno de los palcos. Por ahora es un diseño edilicio que para hacerse realidad deberá activarse con la puesta en marcha de la obra. De concretarse, para Newell’s sería un golazo.