Un joven de 20 años acusado de atacar a un remisero y robar en tres estaciones de servicios en la ciudad de Firmat fue condenado a 10 años de prisión. La pena fue impuesta por los jueces de primera instancia Lorena Garini, Benjamín Révori y Adrián Godoy en el marco de un juicio en el que se abreviaron los procedimientos y que se desarrolló en los tribunales de Melincué.
El fiscal que representó al Ministerio Público de la Acusación (MPA), Julián Cochero, recordó que el condenado, identificado como Julián Jonatan Oscar Castillo, cometió su raíd delictivo el 27 de junio de 2020. En tal sentido expuso que ese día cerca de las 4 de la madrugada "se subió a un remís en calle San Luis al 1.300 y una vez a bordo, agredió al chofer con diferentes objetos contundentes", provocándole “heridas graves en la cabeza y en el rostro”.
Luego subrayó que "en ese marco violencia, Castillo encerró al conductor en el baúl del automóvil y se apoderó ilegítimamente del vehículo", con el que se dirigió "hasta una estación de servicios ubicada en la intersección de las rutas provincial 93 y nacional 33 y, al ser atendido, simuló tener un arma de fuego y expresó su intención de robar”. Al respecto, puntualizó que "a raíz de la intimidación, un playero le entregó un teléfono celular y 300 pesos".
Agregó que "tras intentar apropiarse de otros bienes ajenos, se traslado a otra estación de servicios cercana y desde la puerta del minimercado le solicitó cigarrillos a un empleado. Inmediatamente después, el agresor ingresó al local, trató de sustraer diversos elementos y no lo logró por razones ajenas a su voluntad".
A su vez, "Castillo fue a una tercera estación de servicios, ubicada en la esquina de la ruta nacional número 33 y la calle Cincuentenario de Firmat, donde cometió un nuevo robo”, afirmó el fiscal. Y tras detallar que “amenazó a quienes estaban en el lugar y se llevó todo el dinero que había en una caja registradora y en una billetera de trabajo”, finalmente indicó que "al llegar a la esquina de Azorpado y Paraguay, bajó al remisero del baúl del auto".
Robo de motocicletas
"En Firmat, el condenado además sustrajo dos motocicletas que estaban estacionadas en la vía pública", señaló el representante del MPA, y resaltó que "en otra ocasión, robó una moto y la abandonó a pocos metros del lugar, dado que el vehículo no estaba en condiciones óptimas para circular".
Castillo reconoció su responsabilidad penal como autor de privación ilegítima de la libertad; robo calificado (por haber causado lesiones graves); robo agravado (por haberse tratado de un vehículo dejado en la vía pública); robo simple _dos hechos en grado consumado y otro como tentativa_, y una tentativa de hurto agravado (por haber sido de un vehículo dejado en la vía pública).
En tanto, la defensa aceptó la calificación penal de los ilícitos, la pena a 10 años de prisión efectiva impuesta y la modalidad del juicio, mientras que las víctimas expresaron estar de acuerdo con lo resuelto.