
Lunes 22 de Febrero de 2021
Desde fines de 2015 hasta principios de 2018, la banda logró traficar cerca de 40 kilogramos de cocaína y media tonelada de marihuana, cuyo cargamento fue secuestrado en parte en distintos procedimientos.
De acuerdo a lo informado por el Ministerio Público Fiscal (MPF) en su sitio institucional fiscales.gob.ar, el ex miembro de la Brigada de Orden Urbano de la Policía de Santa Fe, Edgardo Baigoría, fue condenado a quince años de prisión por los delitos de organización del comercio ilícito de estupefacientes y tenencia con fines de comercialización, agravado por su calidad de funcionario público y la cantidad de personas intervinientes.
También recibieron penas civiles que eran parte de la banda. Emanuel González obtuvo nueve años por ser considerado partícipe secundario de los mencionados delitos, y Estela Castillo, Osvaldo Salva y Cristian Mansilla seis años por la tenencia con fines de comercio.
Por su parte, el gendarme Damián Sosa fue condenado a cuatro años de cárcel como autor de encubrimiento agravado por haber actuado con ánimo de lucro y por su calidad de funcionario público; mientras que sus compañeros Santiago Alejo e Ismael Britos recibieron penas de tres años por ser partícipes necesarios.
De acuerdo a lo ventilado en el juicio, Baigoría y su socio González obtenían la droga desde Paraguay y provincias limítrofes, a las que viajaban para luego hacer el comercio en la ciudad de Santa Fe, para lo cual contaban con fondos, contactos nacionales y extranjeros y la logística necesaria para realizar el transporte de los estupefacientes.
El fiscal Martín Suárez Faisal, quien durante los alegatos solicitó condenas similares a las impuestas por los jueces, se refirió al caso como “muy relevante porque se desbarató una organización de gran envergadura, comandada por un policía de la Provincia de Santa Fe en funciones, que era protegida por varios integrantes de Gendarmería Nacional que también fueron condenados por el encubrimiento, y que tenía vínculos en el exterior, fundamentalmente en Paraguay, en ciudades argentinas cercanas a las fronteras y en todo el territorio santafesino, donde se distribuían los estupefacientes.”
El juicio había comenzado en octubre del año pasado y se realizó bajo una modalidad semipresencial, mediante la cual los imputados siguieron las audiencias desde sus diferentes lugares de detención.
Durante el debate oral declararon cerca de 150 testigos y los fundamentos del veredicto se darán a conocer el 4 de marzo.