La concentración y el desplazamiento de recursos policiales (efectivos y móviles) hacia las ciudades más grandes de la provincia generan preocupación y reclamos de parte de las localidades más pequeñas, que ven mermadas sus dotaciones y piden más colaboración de las autoridades centrales.
El traslado de los efectivos de la Guardia Rural Los Pumas desde Empalme Villa Constitución a la cabecera departamental generó zozobra en la comuna afectada y entre los productores, quienes sin embargo no pudieron evitar la medida.
Pero el caso de Los Pumas de Empalme, del que dio cuenta oportunamente este diario, parece haber sido la primera luz de alarma. Ahora, fueron los presidentes comunales de Villa Amelia, Coronel Domínguez y Uranga quienes presentaron un reclamo en la Secretaría de Integración y Fortalecimiento Institucional de la Provincia de Santa Fe, por la decisión de la Unidad Regional II de quitarles móviles policiales para que presten servicios en Rosario.
Las localidades, distantes de Rosario entre 31 y 43 kilómetros (Uranga es la más lejana), cubren los gastos de mantenimiento, reparaciones mecánicas y el combustible de los vehículos que hasta el momento estaban asignados a sus jurisdicciones. Y algunos de ellos, aseguran ahora, les serán retirados.
En la nota que dirigieron al funcionario provincial, José Luis Freyre, los mandatarios detallaron que los móviles fueron reparados con recursos propios. “En Villa Amelia llevamos invertidos 259.923 pesos para funcionamiento policial” indicó el presidente comunal, Javier Ruggieri. Y agregó: “Esto implicó duplicar el presupuesto anual destinado a seguridad”. En Uranga, Alex Sabbatini expresó que “se gastaron 100 mil pesos para reparaciones”.
En el caso de Coronel Domínguez, Mónica Villegas solicitó “la reparación del móvil 7.055 que salió de funcionamiento por problemas mecánicos muy costosos que en esa oportunidad desde la comuna no podemos afrontar, y la Unidad Regional II tampoco”.
Problema regional
En diálogo con La Capital, Villegas comentó que las localidades reclamantes tienen algunas particularidades, pero aseguró que el problema sería común al resto de los pueblos del departamento Rosario.
Coronel Domínguez tiene 1.500 habitantes. Villa Amelia está en los 3 mil, y Uranga en unos 1.200. “Nos venimos reuniendo por distintos temas, entre ellos, el de la seguridad. En este plano se vienen planteando reclamos sobre falta de personal y móviles, las comunas están haciendo muchas inversiones para mantener los vehículos e incluso en infraestructura”, contó a esta diario la jefa comunal.
La funcionaria explicó que en general los pueblos tienen un casco urbano pero también mucho territorio en zonas periurbanas, y advirtió que “hay que recorrer todo. Villa Amelia, por ejemplo, tiene tres barrios sobre la ruta 18, que tienen que ser atendidos en materia de seguridad. Nosotros, en Coronel Domínguez, tenemos uno”, afirmó.
Además de lamentar “profundamente” el fallecimiento del titular de la Unidad Regional II, Adrían Forni, con quien “veníamos teniendo algún diálogo”, la jefa comunal resaltó que el problema de la falta de recursos es “de vieja data”, no de una administración en especial. No obstante, resaltó que ahora se está dando un desplazamiento de recursos de la periferia a los grandes centros urbanos, y que eso repercute en la seguridad en los pueblos. “Y lo más importante es que esto se da luego de que las comunas vienen haciendo inversiones que en algunos casos superan sus presupuestos originales destinados a este rubro”, enfatizó.
Coronel Domínguez tiene un problema adicional, que es el mal estado del edificio de la subcomisaría 14, que “literalmente pone en riesgo la integridad de los efectivos”. Y aseguró que la comuna tiene para ofrecer un lugar con infraestructura elemental que requeriría una inversión mínima para levantar una nueva seccional. Pero este tema es para un tratamiento aparte.
Menos combustible
Para colmo de males, los jefes comunales afirman que en lo que va del año la Unidad Regional II realizó una reducción en los litros de combustibles que enviaba para los vehículos, por lo que las comunas debieron asumir el costo mensual de la nafta faltante para poder mantener la calidad y modalidad del servicio. Y ahora se suma “la quita de los móviles y los efectivos policiales para que presten servicio en la ciudad de Rosario, dejando a estos pueblos son la cobertura de seguridad necesaria”, insisten.
Frente a esta problemática, el diputado provincial Esteban Lenci presentará un proyecto en la Legislatura, convencido de que “no se puede descuidar a las vecinas y vecinos de los pueblos para poner parches en la ciudad de Rosario. Sabemos que tres móviles policiales no van a solucionar la problemática en una gran ciudad, pero si son de vital importancia en las localidades más pequeñas. El gobierno provincial debe tomar medidas", remató el legislador.