La crisis social y económica que atraviesa el país se refleja en cada actividad. Debido a la gran cantidad de inconvenientes que afrontan cotidianamente y a la caída sostenida de las ventas, los comerciantes de calle San Luis decidieron que sus negocios abrirán sus puertas hoy, que es un día no laboral con fines turísticos. Y además de ratificar esa postura, anunciaron que fortalecerán la política de promociones y rebajas para poder activar el consumo.
Con este panorama, la totalidad de locales de calle San Luis tendrá actividad hoy, en horario habitual. Así lo confirmó Miguel Rucco, presidente de la Asociación de Comerciantes de calle San Luis, quien además explicó que el nivel de ventas de junio finalizó 25 por ciento abajo, en relación al mismo mes del año pasado.
"Hemos perdido muchas ventas respecto a años anteriores, no podemos darnos el lujo de cerrar ante este panorama. Por eso, decidimos en comisión y en asamblea con los comerciantes que este lunes (por hoy) vamos a abrir normalmente, en horario habitual", expresó el referente de los comerciantes de esa zona de microcentro rosarino.
En ese sentido, puntualizó que "también habrá ofertas especiales para ver si podemos conquistar la demanda del público en un fin de semana largo, en esta época del año. Nosotros queremos que la gente se acerque a calle San Luis, y por eso vamos a poner el acento en las liquidaciones de invierno de manera anticipada".
Y explicó: "Esto lo hacemos porque necesitamos las ventas para poder cumplir con nuestras obligaciones, tanto en sueldos como en aguinaldos, y también con obligaciones con el Estado, que cada vez son más".
"Porque la presión tributaria es cada vez más grande. Si te atrasás con la Afip, los intereses punitorios son del 70 por ciento. Y si te atrasás un par de meses, ya se hace imposible cubrir esos gastos. Se hace una pelota financiera cada vez más grande. Por eso hay muchos comercios en procesos preventivos de crisis, hay muchos locales que están sosteniendo estructuras deficitarias, y todo eso vuelve muy complicado estar tres o cuatro días con las puertas cerradas", profundizó Rucco.
En relación a la abrupta caída de las ventas, el comerciante fue tajante. "El año pasado fue muy malo, y este es todavía peor. Y en el sector mayorista, todo se siente hasta tres o cuatro puntos porcentuales más. La demanda que falta se siente primero en el mostrador del mayorista, después se traslada al minorista y hasta la industria, que son nuestros proveedores. Ahí se está cortando una cadena que es muy peligrosa", comentó.
Y subrayó: "Nosotros vendemos mucho menos, demandamos para nuestros proveedores mucho menos, y hay muchos sectores de la industria que están bajando su capacidad productiva y hasta suspenden personal, algunas horas, o algunos días en la semana, para no sobre stockearse, porque no hay demanda".
Otras determinaciones
La angustiante realidad económica y social obliga a los responsables de los negocios a tomar estas medidas. "En otra época, ante otro escenario económico, no hubiésemos tomado este tipo de determinaciones. Nos hubiese gustado poder disfrutar del fin de semana largo", confió Rucco.
Sobre las características de este fin de semana largo y la presencia de turistas en la ciudad, el comerciante apuntó que "sabemos que este fin de semana largo, para el turismo es importante. Yo creo que no supimos conquistar al turista de fin de semana largo en Rosario. Esta es una ciudad linda, tiene lugares para ir, pero la prensa de afuera, sobre todo de Buenos Aires, relaciona a esta ciudad con un lugar inseguro, y nos perjudica muchísimo".
En relación a la jornada del martes, comunicó que "no vamos a trabajar, porque en ese tipo de feriado, hay que pagarle de otra manera a los empleados, y la gente no se acerca mucho al centro".