Durante la primera y segunda ola de la pandemia, los adultos mayores estuvieron entre los grupos más castigados. Nadie olvida las imágenes de las ambulancias en las puertas de los geriátricos, ni aquellas de hijos y nietos que se despedían de su familiar en la puerta de un hospital sin saber si volverían a verlo.
La edad avanzada y las múltiples comorbilidades frente a un virus desconocido para el que no había vacunas en los primeros tiempos resultaron factores determinantes: miles de ancianos vieron su salud comprometida a causa del Covid.
Incluso, la tercera ola también los afectó, aunque de una manera diferente, ya que los cuadros fueron mucho más leves.
Ahora, en esta cuarta ola, a poco de empezar el invierno, el Covid parece "esquivar" a los más grandes. Las buenas tasas de vacunación (más del 60% de los adultos mayores ya tiene primer y segundo refuerzo en Santa Fe) parecen explicar por qué, en los policlínicos Pami 1 y 2 de Rosario, casi no se registran hisopados positivos de coronavirus, aun cuando los contagios se multiplican día a día en la ciudad y toda la provincia.
Un dato llamativo es que tampoco están detectando gripe, enfermedad que tuvo un brote durante el verano.
Quienes están internados por complicaciones respiratorias en Pami 1 y 2 no tienen ninguna de esas dos virosis. Los problemas obedecen a otros gérmenes, propios de la época.
Los directores médicos de ambos centros de referencia en la atención de adultos coincidieron en señalar a La Capital que no están viendo en los mayores de 60 un correlato de casos ante el incremento de los contagios de Covid a nivel general.
En Rosario, en algunos centros de testeo del área pública, esta semana, 4 de cada 10 personas que se hisoparon dieron positivo. En el ámbito privado, en el Centro E, un espacio de referencia para pacientes Covid, el jueves tuvieron un 60% de positividad.
Guillermo García, a cargo de Pami 1, comentó que la situación allí es diferente. "Hace dos días dimos de alta al único paciente que teníamos internado por coronavirus en sala general", ejemplificó.
La misma "foto" están viendo en Pami 2. Juan Herrmann, director médico de la entidad, comentó: "De los 24 hisopados que hicimos en los últimos días, ninguno fue positivo para Covid".
Si bien en dicho policlínico la demanda de camas es alta (lo que es habitual para la época), del total de los ingresos el 30% es por problemas respiratorios, pero corresponden a otras virosis: ni Covid ni gripe.
"Hacemos una evaluación sistemática de todo paciente que ingresa, por eso podemos decir que al menos hasta ahora la cuarta ola no está afectando a nuestros afiliados", señaló.
Los profesionales aseguraron que la campaña de vacunación está dando sus frutos y que incluso en este nuevo pico "estamos mejor que en el verano" cuando Ómicron hizo estallar en pocos días los contagios y los llevó a números alarmantes.
"En ese momento tuvimos una gran demanda ambulatoria e incluso internaciones. Eso no lo estamos viendo ahora", coincidieron.
Para los especialistas, la población de adultos mayores toma muchos recaudos y se cuida mucho más que los jóvenes y adultos jóvenes. Otro dato a tener en cuenta a la hora de explicar las bajas tasas de Covid entre la gente grande.
"Lo que vemos en Pami 1 es que los pocos pacientes que se contagiaron en el último mes y que llegaron al hospital para consulta, lo cursaron de manera leve. Es probable que muchos otros, aunque se hisopen y den positivo, cursen la enfermedad en su casa sin necesidad siquiera de llegar al efector de salud", mencionó García.
"La demanda general de consultas es alta pero esperable para la época. De todos modos, la pandemia nos enseñó a ser precavidos como nunca y anticiparnos a un posible cambio de escenario. Estamos atentos y preparados para lo que pueda ocurrir en las próximas semanas cuando los casos, como señalan los indicadores, sigan subiendo", mencionaron los médicos.