El endocrinólogo Diego Schwarzstein atendió a Lionel Messi desde los 9 años cuando necesitó iniciar un tratamiento para solucionar dificultades en el crecimiento. Con motivo del estreno de la película dirigida por Alex de la Iglesias que hoy se estrena en Rosario, el médico recordó su participación en el film y por supuesto su vínculo con el crack rosarino y su familia.
El filme se proyecta por primera vez en Rosario en el marco del Festival Latinoamericano de Video hoy a las 11, en la Escuela general Las Heras, donde cursó Messi. Luego a las 19, para todo público, también en la escuela de Buenos Aires al 4800. Y este sábado, a las 20, en El Cairo, en el marco de la función de clausura del Festival.
En declaraciones al programa "Una tarde perfecta" de La Ocho, recordó que tuvo un intercambio con el director De la Iglesia respecto a su parlamento en las escenas de ficción del film "Messi": "Fue él quien me convenció de que haga el papel de médico en la película, además de dar testimonio en la parte documental. También participo en la parte de ficción donde hago de mi mismo, lo cual me resultó muy fácil. En realidad como tenía que hacer de médico, algunas cosas no me parecían apropiadas, y le dije que en ese caso preferiría no hacerlo", relató para indicar que finalmente se pusieron de acuerdo.
Schwarzstein rememoró sus primeros encuentros con el crack rosarino en su consultorio. "Lo vi a Leo cuando tenía 9 años, me consultó por una dificultad de crecimiento, se le detectó un problema y fue tratado hasta los 14 y medio que se fue a Barcelona".
"Lo que hice fue ayudar a solucionar un trastorno de crecimiento, no tiene nada que ver con la cuestión futbolística. El ya era un crack sumamente chiquito. De hecho así llegó a mi consultorio desde donde lo habían mandado desde las inferiores de Newell's, con un mandato que decía algo así como 'este es el mejor pero es muy chiquito y sería bueno que pudiera crecer'. La verdad es que no siempre los médicos podemos ayudar a los chicos a crecer. A veces a los chicos les toca ser bajitos porque es parte de la genética, y eso no lo podemos mejorar", reflexionó.
"Puntualmente en el caso de Leo había un déficit hormonal que al corregirse se pudo mejorar su desempeño en cuanto al crecimiento. La parte futbolística ya la tenía de antes", dijo para afirmar que "el 80 por ciento del tratamiento lo hizo aquí, y cuando se fue siguió un año más de tratamiento en Barcelona".
Respecto a su visión sobre el film de Alex de la Iglesia, sacó a relucir sus sentimientos leprosos: "Esta incompleta la película, falta la parte en que él vuelve a jugar a Newell's".
En tanto Schwarzstein expresó su "satisfacción por poder ayudar a un paciente, uno siente que el deber está cumplido, y si alguien termina transformándose en un personaje de esta magnitud, evidentemente tiene un valor agregado, de ser partícipe en un granito, en una vida como esta".
El médico además analizó que "para él debe ser más fácil ser Messi allá que acá. Hoy Messi es una persona que no se puede sentar en un restaurante, que no puede caminar por la calle. A mi me ha tocado después de terminado el tratamiento asistirlo en algún tipo de proceso médico y para ir al sanatorio tiene que ir disfrazado, con gorro, cara tapada, lentes oscuros".
"En ese sentido los catalanes son más fríos, distantes y desapasionados, lo que le debe facilitar la vida cotidiana", dijo para señalar que cada tanto mantienen "alguna conversación".
Por último recordó que "sus inicios fueron muy duros. Fue sólo con su padre a España, sin la certeza de que iba a llegar a donde está hoy. Eso fue más difícil que los pinchazos, que el tratamiento en general".