Personal policial de diversas agrupaciones desarticuló este martes un búnker blindado que operaba la barra brava de Newell's ubicado debajo de una de las tribunas del estadio Coloso Marcelo Bielsa.
Personal policial de diversas agrupaciones desarticuló este martes un búnker blindado que operaba la barra brava de Newell's ubicado debajo de una de las tribunas del estadio Coloso Marcelo Bielsa.
Durante la inspección, que también se realizó en el de Central, el Gigante de Arroyito, se tomaron diversos recaudos ante el inminente retorno del público a los estadios por una parte, y por la necesidad de disuadir avances coercitivos de las barrabravas en la vida institucional de los clubes, según indicaron fuentes oficiales.
En las imágenes puede apreciarse la gran cantidad de efectivos pertenecientes al Grupo de Operaciones Tácticas (GOT) de la Dirección General de Seguridad Rural "Los Pumas" y por la Policía de Acción Táctica (PAT), quienes emplearon hasta herramientas neumáticas para poder acceder al lugar.
En ese camino hacia esa cámara blindada, debieron sortear una serie de puertas de hierro de varias cerraduras de alta seguridad cada una y una alarma interna con clave digital. Las llaves y la clave de la alarma obraban solamente en poder de la barra brava, por lo que fue necesario disponer de herramientas neumáticas para demolerla.
"No estamos dispuestos a conceder que haya salas fortificadas a las que la autoridad policial no tenga acceso. El regreso del público a los estadios requiere acciones contundentes de afirmación de la autoridad legal para mantener a los violentos lejos de los estadios", señaló el Subsecretario de Seguridad Preventiva, Diego Llumá que lideró la inspección.
Los contenidos hallados en la sala-búnker de la barra brava quedaron bajo custodia de la división judiciales de la jefatura de la Unidad Regional II. "El resto de los objetos podrán ser entregados por las autoridades legales del club en la medida que lo reclamen como propios", indica la notificación oficial.