Comerciantes y vecinos de la zona de Fisherton realizaron un cacerolazo y corte de calle este viernes por la noche por la inseguridad reinante en la zona, que, por otro lado, no escapa a lo que sucede en otros lugares de la ciudad.
Comerciantes y vecinos de la zona de Fisherton realizaron un cacerolazo y corte de calle este viernes por la noche por la inseguridad reinante en la zona, que, por otro lado, no escapa a lo que sucede en otros lugares de la ciudad.
El corte comenzó cerca de las 19.30 en la zona de Donado y Eva Perón -en la mano que va hacia Funes- y durará un par de horas, pero la idea, de acuerdo a los vecinos, es llamar la atención, pero molestar lo menos posible a los conductores que pasan por la zona.
"Después de las últimas semanas esto va de mal en peor, ya no se puede ni circular ni vivir en paz, y decidimos hacer esta movilización con los comerciantes y vecinos para pedir seguridad, para pedir presencia policial, que nos manden recursos, porque no podemos vivir así", relató Fernanda Costa Forcat, titular de la Asociación de Comerciantes de Fisherton, quien agregó: "Tenemos arrebatos permanentemente, los delincuentes entran a las casas, nos arrancan las rejas de los comercios, entran a los comercios, no sé cuál es el límite, venimos de mal en peor".
"Estamos viviendo una realidad muy fea y es muy triste tener que hacer esto para ver si podemos conseguir algo de seguridad", sostuvo en diálogo con Telefe Rosario, antes de referirse al personal de la Comisaría 17, que está a media cuadra de la avenida Perón. "Tenemos una comisaría que es muy inoperante, tenemos recambio de comisario constantes y nunca podemos dar con una persona que nos responda. La comisaría está a una cuadra de la avenida y no existe".
Por último indicó que ahora que empezaron las clases tenemos que cuidar a los chicos, porque "acá no se puede caminar ni una cuadra, porque te aparece una moto, te arrebata la mochila y te amarga el día. Y no se respeta nada".
Por su parte, otra comerciante aportó su mirada sobre la realidad que les toca vivir. "Tenemos arrebatos a cualquier hora, en bicicleta no salimos directamente, ni hablar de cómo los delincuentes andan caminando por las terrazas. Estamos hartos de hartos de llamar a la policía que no hace nada. Tampoco en la Comisaría 17, que está acá a media cuadra y no hace nada. Ya no sabemos qué hacer", argumentó la mujer en tono de queja.
y enseguida agregó: "Este era un barrio tranquilo y de repente tenemos que hacer estas cosas, que no estamos acostumbrados, pero nadie hace nada. Te toman la denuncia, pero nadie hace nada. Te dicen que no hay móviles, que no hay gente".
Pero no fue la única marcha que se realizó este viernes por la inseguridad, ya que un grupo de vecinos también se manifestó en la zona de Pellegrini y Larrea, quienes salieron a la calle para reclamar por mayor seguridad.
Por Leo Graciarena