¿Por qué una librería municipal en la ciudad? "Para leerte mejor", podría contestar el personaje de un cuento tradicional, refiriéndose a los escritores, escritoras y editoriales vernáculos. Esa es la intención, leer de cerca la ciudad y su gente a 30 años de la creación de la Editorial Municipal de Rosario. Por eso se inaugura, en el marco de la Noche de las Librerías, "EMR Librería municipal", estratégicamente situada en la planta baja de la Biblioteca Argentina (Presidente Roca 731).
A las 19, en la sala central de Lectura la doctora en filosofía Belén Campero presentará la charla del poeta, narrador, ensayista y periodista porteño, Fabián Casas, nacido en Boedo en 1965, distinguido en Alemania con el premio Anna Seghers (2007) y en Argentina con el Konex (2014).
En la inauguración de la librería desarrollará el título: "Algo así como lo que fue leer poesía antes y después de la dictadura”. Casas precisó que no brindará una disertación, conferencia ni clase, "solo será un intercambio con la gente" y en ese tono dialogó con La Capital como en un pequeño adelanto de lo que será.
-Dijiste en una nota que "nuestra vida está construida a través del terror" y eso es "lo que hace movernos y contra lo que hay que trabajar", ¿por qué?
-"Terror" es una palabra más grande, pero creo que lo que más hace mover a las personas es el miedo, te hace ser un esclavo, perdés potencia y eso es lo que quiere el poder para hacer lo que quiere con vos, que caigas en las pasiones tristes como dice Spinoza.
-¿De alguna manera hablás del miedo a la muerte?
-No, no tengo miedo a la muerte, no es un pensamiento recurrente y mi mortalidad es algo que acepté. Hablo del terror que atraviesa a toda la vida cotidiana; el miedo está relacionado a que le pase algo a mis seres queridos, a mis amigos, a lo que no puedo controlar y uno sabe que lo que no se puede controlar hay que trabajar para abandonarlo o te volvés loco.
-En la pandemia pandemia cuidaste a tu papá quien finalmente murió y entre tanto creaste el intercambio de poemas por Whats App. ¿Escribir fue una forma de exorcizar lo que viviste y vivimos todos esos dos años?
-Cuando sucedió lo de mi papá, una persona de 90 años que estaba declinando y no por Covid sino porque era una persona mortal como yo, acepté que debía rendirme. Con mi otro hermano Juan lo cuidábamos durante todo el día, mientras la ciudad estaba vacía, se escuchaban las ambulancias y no veía a mis hijos que estaban con su mamá en el campo. Tenía dos grupos de Whatsapps de personas en diferentes lugares que no podía ver por la pandemia y yo iba escribiendo pequeños apuntes y poemas mientras cambiaba, bañaba y le daba de comer a mi papá y un día llegué a mi casa agotadísimo y me rendí. Pero no solo físicamente, sino simbólicamente. Agarré una remera blanca, la clavé en una escoba y la puse en el balcón: y me rendí, eso me hizo re bien. Dormí profundamente y al otro día estuve primero en la fila para cuidar a mi viejo. La idea de poder rendirte es potente, rendirse es algo liberador.
-¿Te preguntaste por qué se inaugura en Rosario una librería municipal, para escritores, escritoras y editoriales de la ciudad y te invitan a disertar a vos, un porteñísimo hombre de Boedo?
-La verdad que no. Siempre pensé que Rosario y toda esa zona de Santa Fe es una especie de Dublín argentina. Hay narradores y poetas mujeres y varones extraordinarios. El epicentro de esa zona hídrica del Litoral produce escritores extraordinarios que tuvieron una influencia central en mí cuando empecé a escribir y es cierto, soy del barrio de Boedo, pero llega un momento en tu vida que sos un nómade, no sos de ningún lugar, tal vez por eso me tuvieron en cuenta.
Casas adelanta que su diálogo con el público será "Algo así como lo que fue leer poesía antes y después de la dictadura"
¿Será "algo así"?
"Príncipes violentos de los setenta
¿Qué podemos hacer por ustedes?
No se convirtieron en políticos
ni se exiliaron, ni están
con dos enes en el pecho debajo de la
tierra...".
O "¿algo así?"
"¿Quién consigue expresar sus emociones
en una simple conversación?
¿Qué preguntas hacemos
para que nadie nos responda?
Lo cierto es que el taxista
equivocó el camino. Y es tarde...".
(2003, Oda, Ed. Libros de Tierra Firme)
Para develarlo habrá que ir este viernes a la nueva librería rosarina que de ahora en más convocará a escritores, artistas, editores, lectores y títulos del extenso catálogo de la Editorial Municipal y la producción de todas las editoriales locales y regionales.
El patrimonio editorial estará integrado por UNR editora, HyA ediciones, Casagrande, Beatriz Viterbo, Danke, Libros Silvestres, Mal de archivo, emisiones Listocalisto, Iván Rosado, Capitana, Neutrinos, Editorial Biblioteca (Biblioteca Popular C.C.Vigil), Serapis, Ciudad Gótica, Baltasara, Aguará, Último recurso, Brumana, Nube negra, Le pecorenere, Yair ilustrado, Otro cauce, Homosapiens, Prohistoria, Multiversal ediciones, BS colectivo editorial, Rabdomantes, Monumento Nacional a la Bandera, Pequeña Ortiga, Museo de la Memoria, Museo Castagnino+macro, GULA editorial, Laborde Editor, Carpe literario, UNL, EDUNER, Ediciones Abend, Turba ediciones, Perfeito ediciones, Editorial Patas de Cabra, AlfonZina editoras, Fuerza y Posibilidad ediciones, Fog of War, Interlibros, Iracema ediciones, La Ciudad De Las Mujeres, Minusculario, Le Noise, El Salmón, A que te juego un cuento, Femiñetas, Mburucuyá ediciones, Cosas Invisibles, Mundo Quina, Natalia Holand, Omachi, Menta Zines, La jurisdicción del sutidor, Poli Antelo y Silvio Roberto Santos ediciones.