El arquitecto argentino César Pelli sostuvo que el país atraviesa un momento “próspero”
en materia económica y manifestó su asombro por el desarrollo registrado en el mercado inmobiliario
local a pesar del escaso crédito hipotecario. Pelli, al participar hoy del encuentro Business Point
Inmobiliario que tiene lugar en el hotel Hilton, de Puerto Madero (Buenos Aires), calificó además,
como algo habitual en las grandes ciudades a la protesta que llevan adelante los vecinos de
determinados barrios en contra de la construcción de grandes torres.
El arquitecto -que tiene como una de sus obras emblema las Torres Petronas de Kuala Lumpur-
se preguntó cómo se produce el desarrollo inmobiliario en la Argentina, a lo que respondió que es
un “misterio” sin comprensión. “En todos los países en los que he participado
siempre ha habido préstamos de algún tipo, normalmente del sector privado”, dijo Pelli. A su
entender el desarrollo inmobiliario de las grandes ciudades de Argentina “está creciendo muy
bien” y dijo, respecto de Buenos Aires, no estar de acuerdo con las opiniones que ven a
Puerto Madero como un barrio saturado de edificios y sin suficientes espacios verdes. “No
siento que haya demasiados edificios altos en Puerto Madero. No comparto la idea de que esté
saturado, me parece que hay suficientes espacios abiertos y verde”, opinó.
Otra de las preocupaciones del arquitecto tucumano -de 82 años- es la necesidad de
“continuidad” en los proyectos inmobiliarios y arquitectónicos. “La continuidad
es esencial para el largo plazo, no sé cómo se puede trabajar en otro clima” que no sea el de
continuidad de proyectos, dijo Pelli. “A la Argentina la veo desde lejos. Tuvo muchos años de
zozobra. Ahora son años prósperos. Lo más extraño y mortificante desde afuera es la falta de
continuidad” en las políticas de fondo, opinó. Al comentársele las protestas vecinales contra
la proliferación de edificios, dijo que “es un problema de las ciudades. Las condiciones
cambian. Lo importante es que (los proyectos) se adapten de manera lógica y predecible”,
indicó.
Respecto de la crisis originada en Estados Unidos con las hipotecas de baja calidad, afirmó
que “hasta ahora no han afectado para nada las obras a cargo nuestro. Pero el mercado
inmobiliario norteamericano se mueve a través de préstamos, y si ellos no se brindan, ahí va a
haber problemas”. En otro tramo de su disertación Pelli comentó que los principales
inversores mundiales en el sector inmobiliario provienen de Medio Oriente (Emiratos Arabes,
petroleros), Rusia (con las privatizaciones industriales) y Japón.
Respecto de tendencias en la construcción señaló que aunque se construyen edificios con
múltiples funciones -departamentos, oficinas y hoteles-, es más barato que tengan una sola función.
Dijo que la “concentración” vertical de la construcción es inevitable ya que la
horizontal demanda “más distancias, más uso de los automóviles”.
Al disertar ante un público compuesto esencialmente por desarrolladores inmobiliarios y
corredores, Pelli hizo un recorrido de su obra arquitectónica desde su proyecto para el World Trade
Center de Nueva York, las torres Petronas de Kuala Lumpur, el puerto de Londres, proyectos en
Madrid, en Bilbao, Sevilla, Milán, Hong Kong, México, Los Angeles, Japón y Shanghai. Se trata de
grandes torres vidriadas rodeadas de parques que son destinadas para grandes corporaciones, museos,
o complejos que agrupan departamentos, oficinas y hoteles a los que su estudio accedió a través de
concursos. En Chile el estudio de Pelli tiene a su cargo la construcción de torres de 300 metros de
altura para el grupo Cencosud y en Buenos Aires la “perlita” es el edificio corporativo
de la petrolera Repsol YPF, que incluye una pérgola y un jardín inserto en el edificio, que
incluirá árboles autóctonos argentinos.