El diario The New York Times publicó un exhaustivo informe sobre los incendios en la Amazonia brasileña. La mayoría de los incendios fueron probablemente provocados por agricultores que preparan la tierra para la siembra del próximo año, una práctica agrícola común, dijeron científicos de la Universidad de Maryland. Los científicos que estudian los datos de imágenes satelitales de los incendios en la selva amazónica dijeron que la mayoría de los incendios se están produciendo en tierras agrícolas donde el bosque ya había sido talado. Durante décadas, Brasil transformó gran parte de la selva ecuatorial amazónica en un territorio de pastizales para ganadería y campos de agricultura.
La mayor parte de la tierra agrícola actualmente en uso en la región amazónica de Brasil fue creada a través de años de deforestación. “La mayor parte de esto es el uso de la tierra que ha reemplazado a la selva tropical”, dijo Matthew Hansen, quien es un dirigente del laboratorio de Análisis y Descubrimiento Global de la Tierra de la Universidad de Maryland. “Brasil ha convertido ciertos estados como el de Mato Grosso en Iowa”, dijo Hanson, refiriéndose al Estado brasileño en el borde sur de la región amazónica como una versión tropical húmeda del Estado del Medio Oeste, en las Grandes Llanuras de EEUU. Primero “tienes un bosque lluvioso, y luego sólo hay un océano de soja”, sintetizó.
Con abundantes tablas y gráficos, el NYTimes recuerda que el aumento de los incendios de agosto a octubre de cada año coincide con la temporada en que los agricultores comienzan a plantar soja y maíz. La mayoría de los incendios fueron probablemente provocados por estos agricultores, que preparaban la tierra para la siembra del próximo año, una práctica agrícola común recuerdan los científicos de la Universidad de Maryland. Hay que agregar que esta práctica de quemar las gramíneas secas del año anterior antes de la primavera es común a muchas naciones, no solo a Brasil. La vecina Bolivia también la practica, y de manera legal (ver abajo). Y en Africa esta práctica de los incendios se cree que modeló el paisaje de la sabana desde el fin de la última glaciación y la expansión del hombre moderno, hace 12 mil años. Cuando llegaron los colonizadores europeos, la selva ecuatorial había sido redimensionada por milenios de esta práctica.
Científicos del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales de Brasil calcularon que en lo que va del año hubo 35 por ciento más incendios que en el promedio de los últimos ocho años. Los incendios no son un fenómeno natural en estos bosques”, dijo Mark Cochrane, experto en incendios forestales y ecología de la Universidad de Maryland. “Todos los incendios en esta región son causados por la gente”.
Cochrane señaló que, si bien la gran mayoría de los incendios se produjeron en tierras que ya habían sido despejadas, muchos otros se detectaron con especial intensidad. Dijo que se trataba probablemente de incendios de deforestación, no sólo de incendios para limpiar tierras previamente deforestadas. “Cuando se tala un área, se amontona, se deja secar y luego se quema, se quema muy intensamente, y eso es también lo que apaga mucho de ese humo”, dijo Cochrane.
En los últimos años se ha producido un aumento de la deforestación, tras un largo período de declive. El presidente brasileño Jair Bolsonaro, que asumió el poder el 1º de enero de este año, es criticado por los ambientalistas por sus políticas que han aumentado la deforestación. Un análisis del New York Times reveló que las medidas de aplicación de la ley para proteger contra la deforestación por parte de la principal agencia ambiental de Brasil cayeron un 20 por ciento durante los primeros seis meses de este año, en comparación con el mismo período de 2018.
Después de días de creciente indignación internacional por los incendios, Bolsonaro cambió de curso el viernes y dijo que movilizará a los militares para hacer cumplir las leyes ambientales y ayudar a contener los incendios.
Pero como se indica en esta Sección, la deforestación no solo es una práctica extendida en el Brasil. Bolivia (ver abajo) y Perú también tienen una política sistemática de deforestación y quemas para dar lugar a la agricultura tropical y a la ganadería extensiva. En medios del mundo desarrollado, como la CNN y The Economist, se ha planteado que, al menos en el caso brasileño, la producción de carne es la gran culpable de esta constante expansión de la frontera agrícola en perjuicio de la selva ecuatorial húmeda. Brasil ha crecido notablemente en este rubro.