El "Cristo burlado", un pequeño cuadro del pintor italiano Cimabue, que fue subastado en octubre último por 24 millones de euros, no podrá salir de Francia al haber sido declarado "tesoro nacional" por ese país con el objetivo de que pase a formar parte de sus colecciones nacionales.
El Ministerio de Cultura francés indicó en un comunicado que su titular, Franck Riester, rechazó conceder un certificado de exportación a esa obra y decidió atribuirle el estatuto de "tesoro nacional" por un periodo de 30 meses, informó la agencia de noticias Efe.
El Estado dispone de ese plazo para reunir los fondos necesarios para poder comprarlo y que de este modo se integre a las colecciones nacionales públicas.
La obra, con un tamaño de 25,8 por 20,3 centímetros, fue pintada sobre madera de álamo y formaba parte de una serie de paneles en los que el artista prerrenacentista Cimabue (1240-1302) plasmó escenas de la pasión de Cristo.
El "Cristo burlado" se encontraba en una vivienda de la localidad francesa de Compiègne, al norte de París, donde la familia lo tenía colgado entre el salón y la cocina sin darle mayor valor. Al hacer la mudanza, decidieron llevarlo a analizar con el gabinete de arte antiguo Turquin, que después de los análisis y comparaciones certificó su autoría y autenticidad. Nada de esto sabía la nonagenaria que lo tuvo durante años colgado entre la cocina y el salón de su casa convencida de que era una pintura, probablemente un icono ruso,
La venta de la obra, por 24 millones de euros, estuvo a cargo de la casa de subastas Actéon, que organizó el remate en la localidad francesa de Senlis, situada entre Compiègne y la capital francesa.
"Cristo burlado", por el que pujaron museos como el Metropolitan de Nueva York, es un pequeño cuadro pintado alrededor de 1280 sobre madera de álamo de 25,8 por 20,3 centímetros. Formaba parte de una serie de paneles en los que el artista prerrenacentista plasmó escenas de la pasión de Cristo. La pintura "comparte particularidades" con otros paneles conocidos de Cimabue, "La flagelación de Cristo" (Nueva York, Colección Frick) y "La Virgen y el niño", que está en la National Gallery de Londres.
El Ministerio de Cultura francés destacó que "más que en las otras dos, Cimabue mostró en ella un lenguaje plástico nuevo, que se manifiesta sobre todo en el tratamiento humanista de la figura de Jesús, en las expresiones de los personajes y en el tratamiento del espacio".