El ensayista y escritor Noé Jitrik falleció a los 94 años en Colombia, tras sufrir un accidente cerebrovascular por el que estuvo internado en ese país, según dieron a conocer amigos y allegados del intelectual argentino.
El ensayista y escritor Noé Jitrik falleció a los 94 años en Colombia, tras sufrir un accidente cerebrovascular por el que estuvo internado en ese país, según dieron a conocer amigos y allegados del intelectual argentino.
Crítico literario, ensayista, poeta y narrador, Jitrik integró la revista Contorno, ejerció la docencia en universidades de Argentina, Francia, Colombia, Estados Unidos, Puerto Rico, Uruguay, Chile y México, país al que debió exiliarse entre 1974 y 1986.
Nacido en la localidad bonaerense de Rivera, el 23 de enero de 1928, Jitrik desarrolló una intensa carrera en las letras argentinas. Su obra incluye libro de cuentos, novelas, poemarios y ensayos. Su última publicación, "Un círculo", integra un tríptico con "Tercera fuente" (2019) y "La vuelta incompleta" (2021).
Sus primeros libros son los poemarios "Feriados" (1956) y "El año que se nos viene y otros poemas" (1959). Entre sus ensayos se destacan "Leopoldo Lugones, mito nacional" (1960) y "Horacio Quiroga. Una obra de experiencia y riesgo" (1960), textos que le valieron un lugar de privilegio en le ámbito de la crítica.
En 1953 comenzó a colaborar en la emblemática revista "Contorno", junto a David Viñas, Ismael Viñas, León Rozitchner, Juan José Sebreli, Oscar Masotta y Carlos Correas, entre otros. En paralelo, se dedicó a la docencia en la Universidad de Córdoba, donde conoció a Tununa Mercado, con quien se casó en 1961.
Tres años después, en 1964, se trasladó a Buenos Aires. En 1966, se estrenó "Todo sol es amargo", película de la cual fue guionista. Luego trabajó en Francia y más tarde en México, donde finalmente se radicó después de sufrir amenazas de muerte de parte de la Triple A.
Regresó a la Argentina en 1987, ya finalizada la dictadura militar, y se convirtió en investigador principal en el Conicet. En 1990 dirigió la revista "sYc" y en 1991 se hizo cargo de la dirección del Instituto de Literatura Hispanoamericana de la Universidad de Buenos Aires, puesto que mantuvo hasta su muerte.
Sus ensayos críticos "Muerte y resurrección de Facundo", "El fuego de la especie" y "Los grados de la escritura", entre otros, le valieron el respeto del ambiente intelectual. Recibió numerosos premios, entre ellos, el Xavier Villaurrutia, el Caballero de las Artes y las Letras en Francia, varios Konex, el Pedro Henríquez Ureña.