Buenos Aires.- El terremoto que devastó Chile el mes pasado desplazó unos tres
metros hacia el oeste a la ciudad de Concepción, unos 28 centímetros hacia el oeste-sudoeste a
Santiago y algo menos de cuatro centímetros hacia el oeste a la capital argentina, en tanto que
Mendoza sufrió un movimiento de algo más de 13 centímetros hacia el oeste, según afirmaron expertos
de Estados Unidos en base a observaciones satelitales.
El sismo de 8,8 grados en la escala Richter, ocurrido el 27 de febrero, afectó en ese aspecto
otros lugares del continente americano, como las islas Malvinas y la ciudad brasileña de Fortaleza,
entre unos treinta puntos de ese país.
Este sismo, el quinto más potente desde que se cuenta con instrumentos para medir su magnitud,
también desplazó la ciudad de Valparaíso, en Chile, según mediciones satelitales realizadas antes y
después del fenómeno, con GPS colocados en diversos lugares.
Los especialistas responsables del estudio provienen de las universidades estadounidenses de
Ohio, Hawai y Menfis, el Instituto Tecnológico de California y entidades de América del Sur.
La Universidad de Ohio, una de las que lideran estos estudios, publicó en internet un mapa con
la estimación de los desplazamientos registrados, que irá actualizando con nuevos datos y se puede
consultar en la dirección
http://researchnews.osu.edu/archive/chilequakemap.htm.
Según ese mapa, las ciudades argentinas que se desplazaron, todas en dirección oeste, con leves
variantes al norte o sur, son Buenos Aires (3,39 centímetros); las bonaerenses de La Plata (2),
Olavarría (4,2), Tandil (3,6) y Bahía Blanca (4,4); la pampeana General Acha (8,6); Neuquén (12);
Mendoza (13,4) y San Luis (8,8 centímetros).
Según el diario “The Washington Post”, muchos de los principales sismólogos
estadounidenses se desplazaron de inmediato a Chile tras el terremoto, dado que sus características
lo han convertido en un “laboratorio sismológico” único para estudiar estos
fenómenos.
El experto de la Escuela de Oceanología de la Universidad de Hawaii Ben Brooks dijo hoy a medios
estadounidenses que “el terremoto del Maule probablemente se convertirá en uno de los más
importantes, si no el más importante de todos los sismos jamás estudiados”.
“Hoy en día tenemos instrumentos modernos, precisos para evaluar este acontecimiento y
dado que el lugar (del epicentro) colinda con un continente, podremos obtener densas muestras
espaciales de los cambios que causó”, explicó.
Para el experto, “un evento de estas características constituye una oportunidad sin
precedentes para la comunidad de estudiosos si se hacen determinadas observaciones de manera rápida
y exhaustiva”, agregó.
La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (Nasa) anunció días atrás que, según
cálculos preliminares, el terremoto movió el eje de la Tierra en unos ocho centímetros, lo cual
podría ocasionar que los días fueran más cortos.
Richard Gross, experto de la Nasa, usó un complejo modelo matemático cuyos resultados indican
que el sismo “debería haber acortado la duración de un día terrestre en unos 1,26
microsegundos”.
Mediciones con GPS. El ingeniero nuclear Jorge Barón, titular del Instituto de
Mecánica Estructural y Riesgo Sísmico (Imeris), el estudio referido “son mediciones de
estaciones GPS permanentes que están en territorio argentino y chileno”, donde se mostraba a
través de fotos, el “cambio que se ha producido en estas estaciones durante el terremoto del
Maule”.
“En el terremoto se han desplazado estas estaciones, quiere decir que se ha desplazado la
tierra hacia el oeste”, dijo el especialista, y precisó que, “en realidad, esto nos
está mostrando que es toda una deformación que ha ocurrido en lo que es la franja central, sobre
todo centro-oeste de Argentina y Chile”.
El experto recordó que el terremoto del 27 de febrero pasado “el terremoto fue en el
mar”, mientras que los datos esbozados “fueron medidos sobre la tierra”. El
titular del Imeris dijo que “seguramente en el mar la deformación o el desplazamiento ha sido
mucho más grande”.
(Télam)