El incendio en el Parque Nacional Los Alerces de Chubut “tiene ya una extensión de más de dos mil hectáreas” y allí trabajan alrededor de 200 brigadistas con herramientas manuales y líneas de agua, informó el intendente de la reserva natural, Danilo Hernández Otaño. El fuego continúa activo desde hace cinco días y no deja de aumentar su tamaño. El viento y la sequedad del aire y de la materia vegetal favorecen las llamas. Por ahora no se ven perspectivas de que puedan dominarlo. Por esto, un funcionario rogó por lluvias. “Si la naturaleza no actúa, es muy difícil superar un incendio de estas características”, explicó.
“El incendio tiene ya una extensión de más de dos mil hectáreas, tanto dentro del Parque Nacional Los Alerces como en jurisdicción de la provincia de Chubut”, detalló Otaño, y aclaró que se trata de un “70 por ciento dentro del parque, un 30 por ciento en provincia”. Además, recordó que “el fuego está activo” y “hay peligro” ya que “se está propagando”. Detalló que el incendio “tiene dos flancos, derecho e izquierdo, y un desarrollo longitudinal que ya supera los 8 kilómetros”, mientras “el frente de avance es variable según la geografía entre 800 y 1200 metros”.
Déficit de aviones
Para combatirlo, “desde primera hora” trabajan “intensamente en el flanco derecho, que es el más activo” aproximadamente 200 combatientes de línea, 2 aviones hidrantes AT 802 y 3 helicópteros con “helibalde”. Pero los aviones hidrantes que tiene Argentina son de capacidad reducida. El país no posee grandes aviones hidrantes, como EEUU, España y Grecia, entre otros. Estos grandes aparatos son los que pueden hacer la diferencia ante un escenario adverso como el que se presenta en Los Alerces, donde la superficie afectada no era hasta hace pocos días muy significativa pero el lugar de los focos era de difícil acceso. El agua es abundante y está en el lugar: el propio lago Futalaufquen, en el corazón del parque.
image.png
Un avión hidrante AT 802 de la flota que posee la Nación.
Los países citados tienen una flota de aviones anfibios Canadair CL 215, que cuentan con una capacidad de 5.346 litros de agua o 600 litros de retardante químico. Cuentan además con bombas de gran potencia, que les permiten recargar agua durante una pasada sobre la superficie de un lago o río. En segundos cargan y están listos para el lanzamiento. Los hidrantes argentinos son aviones fumigadores livianos modificados para que arrojen dos mil litros de agua como máximo, y el proceso de carga es mucho más lento.
En Los Alerces hay además un avión de observación y un equipo de drones. Pero la meteorología “no es favorable” para controlar el incendio, sostuvo Otaño. “Es un momento de índice de peligro de incendios extremo”, dijo, y agregó que “el combustible constituido por la vegetación que está en la zona del incendio tiene un muy bajo contenido de humedad por la alta temperatura, por la baja humedad atmosférica y la cantidad de días sin precipitaciones, que ya llevan aproximadamente dos meses”. Los brigadistas se encuentran trabajando con herramientas de mano y equipos de agua con apoyo aéreo en condiciones desfavorables signadas por viento y calor. Hay vientos del oeste de 20 a 30 kilómetros por hora.
El subsecretario de Protección Civil y Gestión del Riesgo del Chubut, Eduardo Pérez, reconoció que “sería de gran ayuda que llueva para que el incendio, que está muy activo, pueda disminuir en su intensidad, porque la experiencia marca que, si la naturaleza no actúa, es muy difícil superar un incendio de estas características”.
Fue intencional
En cuanto a las causas del incendio, el intendente aseguró que “es intencional”, pero “no tenemos un nombre, un responsable”. “Vamos a ir hasta el final en la justicia para que haya una medida ejemplificadora. Han habido muchas denuncias, hay causas en este momento en el Tribunal Oral Federal (de Esquel) de muchos años con procesamiento por incendios, hay tomas en el parque nacional. Lamentablemente los tiempos en la justicia no son los mismos que necesitamos todos”, dijo el gobernador de Chubut, Agustín Torres.
En este sentido, explicó que “hay características de cómo inicia el fuego que dan muestra de la intencionalidad” ya que “son dos focos paralelos que se terminan uniendo, se da en lugares de muy difícil acceso a altas horas de la noche cuando el patrullaje de las brigadas no está tan activo. Esta gente tiene que estar presa y la justicia tiene que actuar con la mayor celeridad posible”, subrayó.
Sin embargo, dijo que la “buena noticia en medio de esta tragedia” es que “no están comprometidos los pobladores del Parque Nacional Los Alerces ni tampoco la zona urbana de Esquel”.
El mandatario provincial también compartió que los gobiernos de las provincias de Buenos Aires, Río Negro y Neuquén pusieron a disposición brigadistas y helicópteros, pero que “en este momento no son necesarios”.
Las llamas afectaron a especies nativas como ñire, laura, caña cohiue, lenga, “que adquieren su corte máximo entre 80 y 150 años de edad”, indicó Otaño. “Ninguna persona que esté viva hoy en este planeta va a ver este bosque en el estado que estaba hace una semana”, subrayó el intendente.