La conexión a una red wifi se convirtió progresivamente casi en un servicio público. La hiperconexión de la sociedad se resume en, por ejemplo, en el hecho de que quienes van a comer a un restaurante piden la contraseña del wifi del lugar casi antes que la carta. Todo el mundo quiere estar conectado todo el tiempo.
Con especial atención sobre este fenómeno, la Federación Ambientalista Internacional (FAI) estableció el 8 de noviembre como el día mundial sin wifi, que se celebra desde el 2016. El objetivo es concientizar sobre el perjuicio que le puede traer a la salud de las personas el uso desmedido de las conexiones y la dependencia casi permanente de diversos dispositivos.
Un informe de la FAI señaló que existen unas 280 millones de redes inalámbricas conectadas alrededor del mundo. Sin dudas, una hackers y estafadores hagan de las suyas y traten de quedarse con datos sensibles de los usuarios que las utilizan.
Con tantas conexiones disponibles en la vía pública, aparecen casos de hackeos por el uso de redes wifi habilitadas para cualquier usuario. Es por ello que se debe seguir una serie de recomendaciones para no caer en manos de estafadores o ladrones de datos personales.
Cómo verificar la seguridad de la red wifi pública
Para verificar la seguridad de una red wifi pública se pueden seguir unos simples pasos.
En primer lugar, lo ideal es comprobar que el nombre de la red que se está por seleccionar coincida con el nombre del lugar donde está el usuario. En todo caso, es mejor preguntar antes de conectarse.
Por otra parte, es preferible conectarse a empresas de confianza y usar conexiones HTTPS. Esto es fácilmente comprobable verificando la URL de cada sitio web al que se quiera ingresar.
De todos modos, en un lugar público, como bares y restaurantes, lo mejor siempre es una red privada y que el lugar proporcione la contraseña para conectarse al wifi.
No divulgar información personal
A menor cantidad de detalles, mejor. En ocasiones, algunas redes de wifi públicas solicitan datos personales y, cuando es así, es mejor descartar la posibilidad de conectarse.
En caso de estar conectado a una red wifi pública, lo ideal es no registrarse en cuentas propias ni hacer compras que requieran proporcionar información de pago, como números de tarjetas, de DNI o contraseñas.
No enviar ni recibir archivos
En caso de estar conectado a una red wifi pública, es aconsejable evitar o disminuir el intercambio de archivos.
La vulnerabilidad se da por el hecho de que los hackers pueden interceptar esos archivos y quedarse con ellos o copiarlos.
Usar una red privada
Las redes virtuales privadas (VPN, por sus siglas en inglés) son conexiones seguras ya que envía los datos a un servidor seguro donde se cifran antes de salir a la red, por lo que los datos de navegación y la información personal quedan resguardados. Se suele usar en aeropuertos.
El usuario que seleccione una VPN debe estar seguro ya que el celular se conecta a un servidor privado que lo redirige hacia las páginas que desea visitar. En estos casos, las redes públicas de wifi se usan sólo para conectar los dispositivos a la VPN; tras ello, la navegación la proporciona exclusivamente la red virtual privada.