Las víctimas argentinas de las prótesis mamarias defectuosas de la firma Poly Implant Prothese (PIP), agrupadas en la asociación Afectadas, presentaron una denuncia penal contra la empresa francesa y reclamaron la creación de un fondo para indemnización por parte de Francia y la Unión Europea (UE), anunció el abogado francés Arie Alimi.
"Somos los portavoces de un grupo de mujeres argentinas y pedimos al Ministerio de Salud francés y a UE la creación de un fondo de indemnización para las víctimas extranjeras con el objetivo de permitir la extracción urgente de estos implantes, dado que pueden ser peligrosos para su salud", declaró Alimi.
La demanda, que rápidamente ganó espacio en los medios de comunicación galos hasta convertirse en una de las noticias del día, es realizada en representación de las 500 mujeres argentinas que integran Afectadas, la asociación que conduce la abogada Virginia Luna. También se suma una asociación venezolana, aseguró el abogado francés.
Alimi añadió que damnificadas de Brasil y Colombia podrían agregarse a la demanda, que será presentada en la ciudad de Marsella donde Poly Implant Prothese tiene su sede.
PIP fue creada por Jean-Claude Mas, de 72 años, quien es buscado por Interpol bajo la acusación de fraude en dos investigaciones judiciales. Según las denuncias, Mas fraguaba los controles sanitarios galos utilizando un gel industrial y no silicona sanitaria, con el fin de ahorrar dinero.
El abogado remarcó que "se han olvidado de las víctimas argentinas" quienes "no tienen la posibilidad de extraerse los implantes".
En Francia, luego de que autoridades sanitarias anunciaran que varias mujeres implantadas con prótesis PIP padecían cáncer, el gobierno recomendó a las damnificadas que se retiraran las prótesis comprometiéndose a solventar el costo de los nuevos implantes, pero solo por motivos médicos y no estéticos.
Alimi aseguro que "en Venezuela existen casos de cáncer en personas que tienen prótesis PIP", pero dijo no poseer estadísticas.
Al igual que en Francia, el gobierno venezolano anunció que retirará los implantes sin costo a las mujeres que lo soliciten pero no financiará las operaciones con fines estéticos.
"Los errores provienen de Francia y hay que enfrentarlos, puede haber un escándalo sanitario importante", agregó Alimi. En tanto, otra de las abogadas que trabaja en el caso, Constance Ambroselli, estimó que "es un caso tentacular y complejo" y afirmó que "el miedo de estas mujeres es legítimo, porque el Estado argentino no toma su responsabilidad, como tampoco lo hacen Francia y la UE".
Ambroselli informó que el costo de las operaciones "rondaría entre los 10.000 y 12.000 pesos".
La organización Afectadas afirma que en Argentina podría haber alrededor de 15.000 mujeres con prótesis PIP, prohibidas en el país y retiradas del mercado inmediatamente en abril 2010.
Roturas
Al menos 25 mujeres alemanas sufrieron rupturas de implantes mamarios defectuosos elaborados por la desacreditada firma francesa Poly Implant Prothese (PIP), en tanto en Holanda la Asociación de Cirujanos Plásticos (Nvpc, por sus siglas en neerlandés) y las autoridades de inspección sanitaria (IGZ) recomendaron la retirada urgente a las mujeres de los Países Bajos. Las roturas en Alemania fueron informadas por las autoridades sanitarias. "Definitivamente recomendamos una operación para extraer los dispositivos de pecho problemáticos", aconsejó el presidente del Instituto Federal de Regulación de Medicamentos y Productos Médicos (Bfarm), Walter Schwerdtfeger. El directivo exhortó a las mujeres a asistir rápido al doctor en pos de una opción quirúrgica, tras conocerse que las afectadas sobrepasaron la veintena.
El fabricante repartió sus bienes para no pagar
El fundador del fabricante de implantes mamarios PIP, Jean-Claude Mas, ha repartido su propiedad entre empresas extranjeras y su familia, según el diario Le Figaro, lo que dificultará que las víctimas reciban una indemnización.
Ante la insolvencia declarada por PIP, a las 2.500 mujeres que denunciaron haber sido víctimas del engaño les resultará difícil recibir una indemnización.
Según el diario, Mas, que admitió haber utilizado un material más económico, repartió sus bienes en empresas de participación extranjeras y transfirió parte a sus familiares.
El diario económico Les Echos cree también que será difícil obtener una indemnización, porque el seguro de la empresa ha interpuesto a su vez una demanda por “declaraciones falsas conscientes”, ya que algunas víctimas están intentando responsabilizar a los cirujanos plásticos de haber recibiendo información insuficiente.
En todo el mundo se calcula que entre 400 mil y 500 mil mujeres se pusieron implantes PIP cuya comercialización y uso fue prohibida por el gobierno francés en abril de 2010. La aseguradora nacional de salud francesa Cnam había presentado una demanda por fraude grave ante la fiscalía general de Marsella, esperando obtener una indemnización, al calcular que la retirada de esos implantes en Francia costará hasta 60 millones de euros.