El Banco Central (BCRA) transitó enero con un marcado perfil vendedor en el mercado cambiario. La institución negoció 190 millones de dólares en el primer mes de año, mientras la cotización oficial de la divisa norteamericana trepó un 5,26% - acumulando unos $9,71 de incremento-, a lo largo de los 31 días del 2023. De este modo, la tasa de devaluación del mes fue la más baja desde agosto pasado.
Aún así enero fue un mes de secuelas, la combinación de los menores rindes producto de la sequía, que azota las producciones agrícolas, y el adelanto de exportaciones que significaron las ediciones en septiembre y diciembre del Programa de Incremento Exportador (PIE), conocidos como “dólar soja” 1 y 2, se tradujeron en una marcada merma de liquidaciones del complejo agroexportador.
El sector promedió ingresos diarios por debajo de los u$s 40 millones y alcanzó el registro más bajo desde 2007. De hecho, en enero de 2022 el complejo cerealero produjo liquidaciones por u$s 2.440 millones y en el primer mes del 2023 lo hizo por u$s 900 millones, marcando una diferencia negativa en los alrededores del 63% interanual.
En este marco, Salvador Vitelli, analista especializado en agronegocios de Romano Group señaló que “el promedio diario de liquidación de enero se está ubicando en los 43,3 millones de dólares. Queda descontar la liquidación de hoy, que vamos a tener los datos mañana, pero en definitiva es el peor promedio diario desde 2007, cuando el promedio de liquidación diario había sido 38,7 millones de dólares”,
Según el promedio de los últimos 20 años, las agro liquidaciones alcanzaron los u$s 70,4 millones en enero, aunque desde 2015 estuvo casi todos los años arriba de los u$s 80 millones. En ese sentido, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) proyectó semanas atrás que el efecto de la sequía en exportaciones generará una merma de u$s 3.900 millones respecto al año pasado, al pasar de los u$s 41.450 millones despachados en 2022 a u$s 37.550 millones para este año.
Sin embargo, dado el adelanto de exportaciones que se produjo el año pasado a través del PIE, la BCR prevé que la liquidación del campo se ubique en u$s 33.550 millones, unos u$s 10.700 millones menos que en 2022. La apuesta del gobierno, que no incluía a la sequía, estimaba que los ahorros de las importaciones energéticas producto de la puesta en marcha del gasoducto Nestor Kirchner supliría, al menos en parte, a las menores liquidaciones del sector agropecuario.
Según datos de operadores de mercado, en el último día del primer mes del año el Central cerró con ventas de U$S 87 millones. A su vez, el dólar contado con liquidación (CCL) operó con una suba de 0,1%, a $369,77 y el MEP registró un incremento de 0,6%, en $ 355,94, en el tramo final de la rueda.
En tanto, en el segmento informal, el denominado dólar “blue” se negoció con una baja de un peso, a $382 por unidad, con lo que en los últimos 31 días anotó un incremento de $25. En el mercado mayorista, la cotización de la divisa estadounidense marcó una suba de 44 centavos respecto a su último cierre, en $187, mientras que en enero acumuló un aumento de $9,84 (5,55%). Así, el dólar con el recargo de 30% -contemplado en el impuesto País-, marcó un promedio de $252,65 por unidad; y con el anticipo a cuenta del Impuesto a las Ganancias de un 35% sobre la compra de divisas, el valor promedio fue de $320,68.
En tanto, el dólar destinado al turismo en el exterior -y que cuenta con una alícuota de 45%- se ubicó en $340,11, mientras que para compras superiores a US$ 300 -y que posee un impuesto adicional de 25%-, se ubicó a $388,70. El volumen operado en el segmento de contado fue de US$ 293 millones, en el sector de futuros del Mercado Abierto Electrónico (MAE) se registraron operaciones por US$ 51 millones y en el mercado de futuros Rofex se transaron US$ 2.139 millones
El “Supermiercoles”
Los mercados financieros aguardan expectantes la decisión de los principales bancos centrales del mundo -la Reserva Federal de EEUU (FED) y el Banco Central Europeo (BCE)- sobre cuál será el nuevo nivel de tasas de interés de referencia. A lo que se sumará también la decisión que podría tomar la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados (OPEP+) sobre los niveles de bombeo de crudo, justo cuando entran en vigencia las sanciones a Rusia.
En todo el mundo, los inversores y los operadores bursátiles esperan que los nuevos niveles de tasas de interés tengan un impacto moderado sobre las economías y que permitan evitar un nuevo ciclo recesivo. El “supermiércoles” llega en momentos en que la inflación parece ceder un poco en las economías más avanzadas del planeta. En ese marco se espera que la FED, el BCE y el Banco Central del Brasil (BCB), entre otros organismos, ajusten sus tasas de interés en una menor proporción de la que venían haciendo el año pasado.