Tropas rusas y ucranianas luchan cuerpo a cuerpo en una ciudad del este de Ucrania, mientras soldados de Moscú respaldados por potentes bombardeos de artillería intentan ganar posiciones en la región frente resistencia ucraniana.
Tropas rusas y ucranianas luchan cuerpo a cuerpo en una ciudad del este de Ucrania, mientras soldados de Moscú respaldados por potentes bombardeos de artillería intentan ganar posiciones en la región frente resistencia ucraniana.
Fuerzas ucranianas reportaban que tropas rusas asaltaban la ciudad oriental de Severodonetsk, donde los combates han cortado los servicios de celular y electricidad y aterrorizan a los civiles que aún no han huido.
Severodonetsk, un centro industrial, se ha convertido en epicentro de la campaña rusa por conquistar la región industrial ucraniana del Donbas, pero el frente de ataque ruso se limitó muchísimo desde el inicio de la invasión rusa. De hecho, la ciudad asediada es sólo un pequeño "pico" en el mapa de Donbas y de Ucrania.
Las ambiciones de Moscú se han ido reduciendo a medida que debía retirarse del norte de Kiev, Chernigov y Sumy, primero, y luego de Jarkov, la segunda ciudad de Ucrania. Todas estas retiradas se hicieron luego de sufrir enormes bajas en hombres y equipo en las primeras semanas de combates. Solo hubo avances rápidos en el frente Sur, desde la península de Crimea, hacia Kerson, Melitopol y finalmente Mariupol, ciudad que para ser tomada fue destruida completamente por las armas rusas.
Desde entonces Moscú se centró en el Donbas central, donde ya tenía territorio tomado por sus aliados locales desde 2014. Pero los avances desde que se inició la llamada "segunda fase" fueron muy lentos y costosos en hombres. Ahora, Moscú presentaría como una gran victoria la toma de Severodontesk, pero de hecho no sería una ganancia estratégica, como sí hubieran sido Jarkov, Chernigov, por no hablar de la pretensión inicial de tomar Kiev. Rusia también ha redoblado esfuerzos por tomar la vecina ciudad de Lysychansk, donde funcionarios ucranianos reportaron bombardeos constantes.
Las dos ciudades, con una población combinada de unas 200.000 personas antes de la guerra, son las últimas grandes poblaciones bajo control ucraniano en la provincia de Lugansk, que forma el Donbas junto con la vecina Donestk. Rusia ha priorizado la toma de las zonas que los separatistas con apoyo ruso no controlan aún.
Fuerzas rusas han hecho pequeños avances en los últimos días, mientras los bombardeos castigaban las posiciones ucranianas y mantenían a los civiles atrapados en sótanos o les hacían huir a la desesperada. Se cree que los ataques con artillería y bombas aéreas en distintas zonas del país han causado grandes bajas en zonas civiles.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, describió la situación en el este como "muy complicada'' e "indescriptiblemente difícil''. El "ejército ruso intenta exprimir al menos algún resultado'' concentrando sus ataques allí, afirmó.
El alcalde de Severodonetsk, Oleksandr Striuk, informó que el sábado había combates en la estación de autobús. Un centro humanitario no podía operar debido al peligro y la electricidad y la señal de celular estaban cortadas. Los vecinos se arriesgaban a ser blanco de los proyectiles de artillería cuando salían a buscar agua a media docena de pozos, señaló.
Algunas rutas de suministro funcionaban y todavía era posible evacuar a los heridos, dijo Striuk. El alcalde estimó que 1.500 civiles de la ciudad, donde antes de la guerra vivían una 100.000 personas, habían muerto en combates, o por falta de medicamentos y enfermedades que no podían recibir tratamiento.
El gobernador regional, Serhiy Haidai, afirmó que los rusos se habían retirado "con pérdidas'' de la zona en torno al poblado de Bobrove, unos 20 kilómetros al sureste de Severodonetsk, pero atacaban desde el aire un poblado cercano en el estratégico río Siverskiy Donetsk.
"La situación en Lysychansk es grave debido a los ataques de los ocupantes, hay muertos y heridos'', escribió en Telegram. Un cine local y 22 edificios residenciales habían sufrido daños.
El ejército ucraniano dijo el domingo por la mañana que las fuerzas rusas intentaban reforzar sus posiciones en torno a Lyman, una pequeña ciudad que sirve como conexión ferroviaria crucial en la región de Donetsk. Moscú afirmó el sábado que había tomado Lyman.
El ejército ucraniano dijo que había intensos combates en torno a Donestk, capital de la provincia. También dijo que Rusia había lanzado una ofensiva el sábado por la noche en torno a la ciudad de Bakhmut, en la vecina región de Lugansk, pero había sido rechazada.
En el mismo parte de guerra, el ejército insinuó que Moscú había sufrido muchas bajas al señalar que ya no se admitían civiles en los hospitales de Crimea, una región de Ucrania invadida y anexionada por Rusia en 2014, porque las camas se necesitaban para militares heridos. Agencias estatales ucranianas también reportaron ataques aéreos rusos en Járkov y Sumy, dos grandes ciudades en el norte de Ucrania