Títeres para darle vida a la historia del vendedor de globos

Benjamín Alvarez tiene 12 años, está en 6º grado de la Escuela Nº 133 "20 de Junio" y está maravillado con un libro de teatro. Se lo dio la "seño" en clases y quedó encantado. El libro no es otro que Teatro para chicos, del escritor argentino Javier Villafañe, que como bien lo describió alguna vez el chaqueño Mempo Giardinelli, fue "un poeta del camino, pero de todos los caminos" que "se pasó la vida viajando por la Argentina y otros países, contando cuentos que inventaba, recitando poemas que le brotaban como agua de manantial y, por si todo eso fuera poco, haciendo títeres".

En el libro que Benjamín eligió para recomendar hay una obra que le gustó más: "La historia del vendedor de globos", donde como bien cuenta "se trata de alguien que vende globos y otro llamado Uñoso se los viene a pinchar". Y mirando a cámara y con el títere de un viejo canoso en sus manos, recita el comienzo de El vendedor de globos, cuando apenas abierto el telón, el anunciador presenta la obra: "Público, respetable público. Damas, caballeros y niños. En esta obra actuarán dos personajes: el Vendedor de globos y el Uñoso. Y al final verán cómo vuelan los globos entre los pájaros y las ramas de los árboles. Y el que tenga suerte podrá volar agarrado al hilo de un globo. Y ahora, damas, caballeros y niños, silencio y atención. Ya está en el parque el Vendedor de globos y cuando él llega debo irme a toda prisa".

Al final de su presentación, asegura que su placer con la lectura también tiene que ver con lo que aprende: "Me gusta leer para aprender y animarme a leer y escribir".

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