Un hombre de 32 años quedó detenido como presunto encubridor del crimen de Alejandro Angel Domínguez, asesinado de seis balazos la semana pasada en la zona oeste. Se trata del hermano de uno de los dos prófugos que están sospechados por el homicidio, aparentemente socios en un búnker de venta de drogas donde la víctima había trabajado unos meses antes de morir. En tanto, al cierre de esta edición había sido demorada la concubina de uno de los prófugos, quien estaba a disposición de la Justicia en una dependencia policial.
Domínguez fue asesinado de seis balazos calibre 9 milímetros la madrugada del lunes 25 de marzo frente a una cochera del Fonavi de Chubut al 7500. Fue minutos después de las 2, cuando vecinos llamaron a la policía tras escuchar una serie de disparos. Junto al cadáver del hombre de 35 años, una moto Honda CG Titán de 125 centímetros cúbicos ofrecía un fuerte indicio de que el crimen no estaría motivado a partir de un robo.
Dichos clave. En este contexto, la madre de la víctima relató a los investigadores de la subcomisaría 22ª que desde hacía unos seis meses Domínguez arrastraba problemas con un par de personas con las cuales había trabajado el año pasado como "vigía" de un búnker de venta de drogas en Brasil al 1700. Al parecer, entre otras cosas, el muchacho reclamaba una deuda que tenían con él.
Lo cierto es que en septiembre del año pasado Domínguez recibió un tiro en la ingle derecha, según sus familiares por haber liberado a una chica que se encontraba atendiendo el quiosco y llevaba muchas horas clamando desde el interior que le abrieran la puerta. Y en diciembre pasado también fue víctima un incidente que incluyó otro balazo.
Para su madre, entrevistada días atrás por este diario, en ambas oportunidades los agresores habían sido las mismas personas.
Buscados. Desde el principio la investigación se orientó a partir de esa hipótesis. Así, el martes de la semana pasada la policía allanó con una orden del juez Luis Caterina una vivienda de Campbell al 2000. Iban en busca de Cristian D., un hombre de 30 años sindicado como el encargado del búnker de drogas con quien Domínguez tenía problemas.
"El sospechoso no se encontraba allí. Sus familiares dijeron que estaba con su padre trabajando en un campo. Supuestamente se iba a entregar, por lo que se lo esperó durante un rato pero no vino. Desde entonces está prófugo", sostuvo un vocero allegado a la investigación, y agregó que en el sitio allanado no se encontraron armas.
Luego de ese procedimiento con resultados negativos, familiares de Domínguez presentaron otro testigo. Se trata de una amiga del muchacho con quien había estado en las horas previas al crimen. La joven estaba esperando que el hombre asesinado volviera a su casa, tal como le había prometido, hasta que, preocupada la demora, salió a la calle.
En ese marco presenció una escena en la cual una mujer le comunicaba a su cuñado, Gustavo C., que su marido (Claudio C.) había llegado a su casa con su ropa ensangrentada producto de "algo que no tendría que haber hecho".
Encubierto. Al analizar lo declarado por la joven, los investigadores concluyeron que las personas sindicadas podrían tener vinculación con Domínguez. De hecho, para ellos Claudio C. sería socio de Cristian D. en el búnker —demolido unos meses atrás— de Brasil al 1700 donde había trabajado el hombre asesinado.
En ese contexto, el juez Caterina ordenó allanar la casa de Gustavo C. Los policías fueron el sábado y si bien no había armas sí hallaron prendas ensangrentadas.
"No sabemos si esa ropa es de Claudio o Gustavo C. Este nos dijo que no sabía nada sobre el homicidio y nos dio un domicilio de su hermano", sostuvo un pesquisa, y agregó que Gustavo C., de 32 años, quedó detenido imputado —en principio— de encubrimiento y por estas horas será indagado en los tribunales provinciales.
A raíz del operativo del sábado, los investigadores allanaron ayer una vivienda en French al 1500 en busca de Claudio C. El sospechoso, de 33 años, no se encontraba en su casa, por lo que fue demorada su pareja quien al cierre de esta edición estaba a disposición del juzgado. También fue allanada sin éxito una vivienda de Caupolicán al 5700, en la zona sur, donde vive la madre de los hermanos C.
Así, al cierre de esta edición había un detenido por encubrimiento y dos prófugos por el homicidio de Alejandro Domínguez. También se esperaban los resultados de pericias sobre la ropa ensangrentada hallada en la casa de Gustavo C. para establecer si tiene vinculación con el homicidio.
En cuanto al móvil del crimen, la hipótesis principal continúa siendo la de los problemas que tenía la víctima con Claudio C. y Cristian D.
"Un tal Claudio"
Según contaron sus familiares en la edición de este diario del domingo, Alejandro Domínguez recibió una llamada “de un tal Claudio” horas antes del crimen. El no estaba y atendió su hermana. “Después se ve que lo encontraron, porque me enteré por otra llamada que le dijeron que le iban a dar plata. El fue con la moto a la cochera de Chubut y ahí lo mataron”.