Los directivos dicen que seguirán bancando a Alfaro
Gustavo Alfaro atraviesa el momento más agitado desde que desembarcó en el universo auriazul.
Más allá de su convicción de que logrará enderezar el paupérrimo presente numérico y futbolístico
que acosa a Central, es evidente que su continuidad comenzó a desgastarse tras la derrota del
sábado a manos de Colón.
23 de febrero 2009 · 01:00hs
Gustavo Alfaro atraviesa el momento más agitado desde que desembarcó en el
universo auriazul. Más allá de su convicción de que logrará enderezar el paupérrimo presente
numérico y futbolístico que acosa a Central, es evidente que su continuidad comenzó a desgastarse
tras la derrota del sábado a manos de Colón. Los directivos cumplieron con todas las peticiones del
entrenador durante la pretemporada (léase, contrataron los cinco refuerzos que solicitó), pero los
puntos no aparecen y la angustia por el promedio ya hace estragos. Si el canalla no cambia la
imagen y no sale de perdedor será complicado sostener al DT en su cargo. A esta altura ninguna de
las partes juega al distraído. "Mi plazo para salvar a Central del descenso es el 30 de junio.
Después si el día de mañana me dicen que me tengo que ir, yo contra eso no tengo nada que hacer",
le confió Alfaro a este diario pos derrota en Santa Fe. Y desde la dirigencia sostuvieron que "por
ahora no cambia nada" y que "el DT tiene el apoyo necesario". Igual a esta altura está muy lejana
esa frase del presidente Horacio Usandizaga afirmando que "Alfaro será el técnico de toda mi
gestión hasta el 2010". En este contexto el viernes ante Banfield se jugaría un partido clave de
cara al futuro. Por lo pronto, hoy habrá un cónclave entre el cuerpo técnico y los dirigentes,
donde podría estar presente el Vasco. Por ahora Alfaro sigue.
Luego de la derrota en Santa Fe, Alfaro estaba apesadumbrado y dolido por el
nuevo traspié. Igual el DT bancó las preguntas y reconoció que en el mundo del fútbol ante los
malos resultados los directivos pueden exigirle al entrenador que de un paso al costado.
—Sos un hombre de fútbol y sabes que mandan los
resultados. ¿Pensás que tenés por delante una semana complicada?
—Tomo la realidad como es. Asumo la responsabilidad
que me toca. Sé en el club que estoy y las necesidades que está atravesando. Pero también sé de
dónde vengo. Sé que en el fútbol todo lo que conseguí me costó muchísimo. Nada fue sencillo para mí
porque no tuve nunca un padrino que me allane el camino y nadie me regaló nada. Todo lo que logré
fue en base a trabajo, sacrificio, tolerancia y esfuerzo. No voy a cambiar en estas circunstancias.
Después si el día de mañana me dicen que me tengo que ir, yo contra eso no tengo nada que
hacer.
—¿Central tendrá la tolerancia que vos necesitás?
—No te lo puedo responder yo. Creo que sí, pero
bueno...
La semana de trabajo que arranca hoy en Arroyo Seco no será
una más. Alfaro sabe que comenzó su cuenta regresiva en cuanto al crédito y como primera medida
necesita como el agua una victoria ante Banfield. Pero no sólo eso. Porque el triunfo debe servir
de punto de partida para encadenar una seguidilla de resultados positivos. En caso contrario
volverán a aparecer los fantasmas.
Desde la dirigencia por ahora no hay plan B en cuanto al técnico.
Consideran que contrataron al entrenador que solicitó la gente y por ello lo bancan. Además
entienden que tiene la jerarquía necesaria para capear el temporal. Por ello le cumplieron en cada
refuerzo que pidió. Igual los resultados mandan y ningún técnico del mundo, mucho menos cuando los
números le dan la espalda, tiene asegurada la butaca. Hoy técnico y directivos se verán las caras
para hablar del presente y el futuro. Por ahora parece que sólo habría cambios de la línea de cal
para adentro. l