El presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, afirmó ayer que "no hubo ningún pacto con el gobierno" para declarar la constitucionalidad de la ley de medios, al tiempo que señaló que la disputa judicial sobre la norma podría continuar. Paralelamente, su colega Eugenio Zaffaroni negó que existan problemas entre los miembros del máximo tribunal.
"Esto no termina acá. Cada parte tiene derecho a hacer valer lo que considera es su razón, en este caso el Grupo Clarín u otros medios", subrayó Lorenzetti, al referirse al proceso de adecuación a la ley que deben encarar los grupos de medios.
El titular de la Corte negó haber pactado con la Casa Rosada para declarar constitucional la norma a cambio de seguir manejando el presupuesto del Poder Judicial, como denunció la diputada opositora Elisa Carrió.
"Tengo un gran respeto por Elisa Carrió. No quiero polemizar con ella, pero sí aclarar", advirtió el magistrado.
"(La Corte) no maneja la caja ni pretende hacerlo", sostuvo Lorenzetti y agregó: "El año pasado me dijeron que era amigo de (el CEO del Grupo Clarín, Héctor) Magnetto y que él había ido al casamiento de mis hijos, que no están casados. Y ahora resulta que es al revés, porque acordamos no sé qué cosa. No sé cuándo pudimos haber acordado algo. Hemos tenido sentencias muy duras. Esto se verá con el tiempo".
El martes, la diputada de la Coalición Cívica anunció que pedirá el juicio político contra el titular de la Corte, a quien acusó de celebrar "un pacto espurio" con el gobierno por el fallo favorable a la ley de medios.
Según Carrió, el acuerdo fue "la caja judicial por la constitucionalidad de la ley", en alusión al proyecto de ley de reforma del Consejo de la Magistratura, que inicialmente preveía que ese organismo administraría el presupuesto del Poder Judicial, lo que finalmente fue corregido por el oficialismo y ese manejo permanece en la Corte.
En otro orden, al ser consultado sobre la oportunidad que eligió la Corte para dictar el fallo, dos días después de los comicios, Lorenzetti aseguró: "Nos decían que la Corte estaba presionada y lo iba a sacar antes de las elecciones, después por qué lo sacamos después. La realidad es que cuando hicimos la audiencia pública, que nos pareció muy importante, nos pusimos a trabajar".
"Nosotros ya habíamos requerido a la Cámara una urgente resolución del caso porque había cautelares y nosotros no podíamos demorar. Nos llevó un tiempo porque había muchas opiniones internas, hablamos muchísimo, trabajamos muchísimo y el fallo lo sacamos cuando estuvo", completó.
Sin problemas. Por su parte, Zaffaroni negó que entre sus pares de la Corte haya "conflictos personales" y señaló que el máximo tribunal, integrado por "siete personajes", según dijo, es "plural".
"En muchísimas ocasiones hemos estado en posiciones diferentes. Tenemos un respeto recíproco entre nosotros, que se ha mantenido al día de hoy. No hemos tenido conflictos personales en el orden interno y creo que no los vamos a tener", señaló el magistrado.
"En esta Corte somos siete personajes, entre los cuales me incluyo, con biografías distintas, historias distintas, experiencias distintas, ideas distintas. Es una corte plural. Y seguiremos siendo eso", apuntó.
Zaffaroni también le restó importancia al posible pedido de juicio político contra el presidente de la Corte, Ricardo Lorenzetti, que la diputada opositora Elisa Carrió anunció que impulsará en su contra, y señaló que "son cosas de la política".
"Cualquier juez, en cualquier instancia, cualquier sentencia que haga a conciencia y hasta con la más absoluta técnica jurídica sabe que políticamente puede recibir golpes, puede recibir de todo, y para eso tenemos que estar preparados", dijo Zaffaroni, y agregó: "En 35 años que llevo de juez he recibido unos cuantos garrotazos, pero es el costo del ejercicio de la magistratura".
En relación con el fallo sobre la ley de medios, Zaffaroni dijo que los votos de los integrantes se realizaron "en plena armonía personal" e insistió en que "no hay un conflicto" entre los vocales y que este tribunal "por sus características no es una Corte que se permita dividirse en mayorías y minorías automáticas".