El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, consideró ayer que la anunciada decisión del presidente Mauricio Macri de no apelar al fallo que declara la inconstitucionalidad del memorándum de entendimiento con Irán "es un cambio bienvenido" respecto de la actitud de Cristina Fernández de Kirchner.
"Espero que veamos una mejoría en las relaciones de Israel con la Argentina, así como un cambio para bien en los vínculos con otros países de Sudamérica", dijo el jefe de Estado israelí, en la apertura de la reunión semanal de gabinete, en declaraciones que reproduce la Agencia Judía de Noticias (AJN).
El ministro de Justicia, Germán Garavano, confirmó el sábado que hoy desistirá del recurso de apelación presentado por el kirchnerismo ante la Cámara de Casación tras el fallo que declaró ilegal el acuerdo con Irán a pedido de la Amia y Daia, con el apoyo del fallecido fiscal Alberto Nisman.
Si bien el juez federal Rodolfo Canicoba Corral había declarado válido el acuerdo, la Sala I de la Cámara Federal lo anuló por inconstitucional en mayo de 2014.
El gobierno israelí apunta contra Irán como el principal sospechoso de haber perpetrado el atentado terrorista contra la mutual judía, el 18 de julio de 1994.
El ataque con coche bomba, que dejó un saldo de 85 muertos y alrededor de 300 personas heridas, fue el mayor atentado terrorista que sufrió la Argentina en su historia.
Según la investigación que en su momento había encarado el fallecido fiscal Nisman, la elección de Argentina como blanco del atentado se debió a la decisión del gobierno de Carlos Menem (1989-1999) de cancelar un convenio de transferencia de tecnología nuclear a Irán.
En 2007, Interpol ordenó la emisión de circulares rojas para capturar a los cinco fugitivos de nacionalidad iraní, con el objetivo de que sean extraditados para ser juzgados en tribunales argentinos.
Ante la ausencia de resultados judiciales, la ex presidenta Cristina Kirchner impulsó en 2013 el controvertido memorándum de entendimiento con Irán, a fin de lograr cooperación por parte de ese país, lo cual disparó duras reacciones en el arco opositor.
El acuerdo, que nunca fue aprobado por el Parlamento iraní, tensó las relaciones con Tel Aviv, que había expresado su rechazo a la iniciativa de la mandataria argentina.
Desde el macrismo, el ministro de Ambiente y rabino Sergio Bergman confirmó ayer la voluntad del gobierno nacional de "seguir investigando" el atentado y juzgar a los responsables de Irán "implicados" en la causa.
Bergman aseguró que la postura del nuevo gobierno frente a Irán se destacará por "contundencia y con firmeza seguir reclamando que toda responsabilidad que tuvieron, no solo iraníes sino funcionarios del Estado de Irán en el pasado, no libera al Irán actual de la responsabilidad de someternos a la soberanía y a la Justicia argentina".
Bergman recalcó que con las nuevas autoridades en Cancillería se retoma "una nueva línea" y destacó la intención del área de Justicia de desistir de una apelación al fallo que invalidó el acuerdo de entendimiento con Irán para revisar la investigación en torno a la voladura de la Amia, que en 1994 dejó 85 muertos.
"Caído el memomorándum y establecido este norte de seguir investigando y promoviendo vías todavía posibles, ya sea en la jurisprudencia legal argentina o de operaciones internacionales, los responsables de Irán tienen que ser juzgados porque están implicados en las causas", insistió Bergman.
Magistratura: cambia la relación de fuerza
El Consejo de la Magistratura cambiará su configuración política tras la asunción de Mauricio Macri como presidente de la Nación, y el kirchnerismo perderá predominio sobre el organismo encargado de impulsar la promoción y destitución de los jueces.
Un organismo clave sobre el cual el kirchnerismo intentó y llevó adelante una gran cantidad de reformas, a tal punto que por impulso de la entonces senadora Cristina Fernández de Kirchner redujo en 2006 sus integrantes de 20 a 13, lo que fue recientemente invalidado por un fallo de la Corte Suprema de Justicia.
El kirchnerismo tenía predominio en el organismo y se imponía con tropa propia, dos senadores y dos diputados, más el apoyo de aliados: la jueza Gabriela Vázquez, integrante de Justicia Legítima y una habitual aliada del entonces oficialismo en varias votaciones; y el académico José Candis, con una fuerte impronta peronista.
Pero el cambio de una sola persona alteraría ya desde el comienzo la relación de fuerzas en el Consejo de la Magistratura: es el del representante del Poder Ejecutivo que inclinará la balanza para el macrismo al menos por un 7 a 6.
El secretario de Justicia durante el kirchnerismo Julián Alvarez llevaba al organismo los mandatos del oficialismo y supo ser un hábil operador en el Poder Judicial, a tal punto que se le atribuyeron muchos de los intentos de reforma en la Justicia.
Alvarez se desempeñó hasta que fuera designado como integrante de la Auditoría General de las Nación y su lugar lo ocupó hasta Nicolás Miguel Angel Soler, pero resta saber quién será ahora el nuevo representante del Ejecutivo en manos de Macri.
El nuevo secretario de Justicia designado es el juez penal y contravencional porteño Santiago Otamendi, un hombre de confianza del Ministro de Justicia de la Nación, Germán Garavano.
Pero según confiaron fuentes del Ministerio, aún no está claro que la representación del Poder Ejecutivo recaerá en manos del secretario de Justicia y es algo que se definirá en los próximos días.
El próximo jueves está convocada una nueva sesión en el Consejo de la Magistratura y será clave: se definirá al presidente y vice del organismo para 2016, así como la integración de las cuatro comisiones.
La presidencia durante 2015 estuvo a cargo de la jueza Gabriela Vázquez que inclinó la balanza en muchas votaciones a favor del kirchnerismo, lo que le valió la crítica de sus pares, quienes la señalaron como oficialista.
El kirchnerismo seguirá manteniendo dos representantes de diputados, dos del Senado y habrá que esperar cuál será el comportamiento de los aliados. Pero ahora la relación de fuerzas cambia: la UCR conserva un representan de la Cámara de Diputados, y otro de Senadores.
También los otros dos representantes de jueces (Luis María Cabral y Leonídas Moldes) así como de los abogados (Adriana Donato y Miguel Piedecasas) siempre votaron en bloque en contra del kirchnerismo.