El gobierno publicó el decreto que ordena a las empresas y al Estado nacional a pagar una suma fija de aumento salarial de $ 60 mil, en dos cuotas de $ 30 mil. La medida atizó la puja distributiva. Las grandes cámaras empresarias rechazaron la herramienta, mientras que entidades representativas de las pymes la apoyaron. El presidente Alberto Fernández pidió a los empresarios que “no se quejen” y paguen el incremento, mientras que el secretario de Industria, José Ignacio De Mendiguren, los interpeló: “Así como les gusta que les subsidien las tasas o también ser rescatados en los momentos de crisis, ahora el Estado interviene para recuperar el salario”.
Los presidentes de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), Alfredo González; de la Unión Industrial Argentina (UIA), Daniel Funes de Rioja; de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), Mario Grinman, y de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino, rechazaron el aumento salarial de suma fija decretado por el gobierno nacional. Dijeron que los incrementos deben ser acordados en paritarias.
González, de Came, afirmó que las pymes no están en condiciones de pagar el bono que implementó el gobierno para los trabajadores por la crisis que vive el sector. Grinman, de la CAC, resaltó que “el gobierno no debe inmiscuirse en las relaciones entre privados porque eso genera distorsiones”. Funes de Rioja, de la UIA, acentuó: “Creemos en las paritarias, hace un año y medio que venimos conversando con el gobierno para que no interfiera en ellas”. Por su parte, Pino reafirmó que, desde la Sociedad Rural, no pueden afrontar, como sector, el pago de ese dinero. También la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco) y la Federación Argentina de Entidades de la Construcción (Faec) reivindicaron los acuerdos paritarios.
Desde otro sector de la representación empresarial, cámaras pymes respaldaron las recientes medidas del gobierno nacional. La Confederación Federal Pyme Argentina señaló que “esta batería de iniciativas, sin dudas necesarias para mantener el consumo interno”. Por su parte, la Central de Entidades Empresarias Nacionales (CEEN) calificó como “imprescindible” la “recomposición de los ingresos” En la misma línea, el presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA), Daniel Rosato, destacó que se trata de una medida “que se merece el trabajador por la pérdida de compra que ha tenido”. También se pronunció a favor la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme).
El presidente Alberto Fernández pidió a los empresarios que “no se quejen” por el pago de la suma fija para trabajadores. También apuro a los mandatarios provinciales. Dijo que le llama “la atención que Catamarca y La Rioja puedan” pagarla “y la ciudad más opulenta (por Buenos Aires) tenga dificultades para hacer eso”.
“A los empresarios que se llenaron de plata los dos últimos años en los que Argentina creció 16% y en la pandemia llegó la hora de distribuir. Que no se quejen, que alguna vez piensen en la comunidad en la que viven y dejen de pensar en sus bolsillos. Lo que estamos haciendo es un poco de Justicia”, les dijo el jefe de Estado.
El secretario de Industria y Desarrollo Productivo, José Ignacio de Mendiguren, afirmó que “no está justificada” la posición expresada por Came y la UIA en contra del pago de una suma fija de $ 60.000 a trabajadores y trabajadoras. “Nadie discutía cuando, en plena pandemia, el Estado les brindó asistencia extraordinaria y lo hacen cuando la intervención va en línea de recuperar salario”, expresó.
“En el fondo la discusión debería ser el rol del Estado porque les gusta que les subsidien las tasas o también ser rescatados en los momentos de crisis”, insistió. El funcionario destacó que “el índice de desempleo más bajo de los últimos 10 años y sabemos lo que es el drama de la desocupación, el que no tiene trabajo, no tiene salario”, indicó.
En cuanto a las medidas anunciadas el último domingo por el ministro de Economía, Sergio Massa, aclaró que el objetivo es “morigerar el impacto de la devaluación, manteniendo la actividad y mejorando el poder adquisitivo del salario”.
El gobierno oficializó el miércoles por la noche el pago del bono de $ 60.000 para todos los trabajadores, tanto del sector público como privado, que perciban salarios netos inferiores a los $ 400.000. Este monto será abonado por los empleadores en dos cuotas de $ 30.000, con los salarios devengados en los meses de agosto y septiembre. Serán a cuenta de paritarias.