El gobierno provincial aspira a concretar esta semana la colocación del bono de deuda para financiar obra pública. Aunque el monto autorizado por la Legislatura es de mil millones de dólares, en este tramo la emisión rondaría los u$s 500 millones.

Se abrió una ronda de presentaciones con inversores y la licitación se podría realizar en los próximos días. La colocación sería por u$s500 millones
El ministro de Economía de Santa Fe, Pablo Olivares.
El gobierno provincial aspira a concretar esta semana la colocación del bono de deuda para financiar obra pública. Aunque el monto autorizado por la Legislatura es de mil millones de dólares, en este tramo la emisión rondaría los u$s 500 millones.
“Estamos con los pasajes en la mano”, habían señalado, tal como lo informó La Capital, los funcionarios del Ministerio de Economía santafesino el viernes pasado.
La baja del riesgo país después de las elecciones, pero también la resistencia que muestra a un descenso mayor, le sugiere al gobierno provincial que la actual es la ventana de oportunidad para realizar la operación. La reciente emisión de deuda de la ciudad de Buenos Aires, a una tasa del 8,1% y siete años de plazo, clavó un mojón en ese camino. Los cálculos santafesinos ubican los rendimientos a pagar a mitad de camino entre los porteños y los cordobeses, que pagaron 9,7% por endeudarse en junio pasado.
El monto autorizado por la Legislatura santafesina es de mil millones de dólares, pero la colocación sería por una cifra menor en esta etapa, más cercana a los u$s 500 millones.
Un dato no menor es la necesidad de que la operación tenga el aval del Ministerio de Economía de la Nación, como ocurrió en el caso de la emisión de Caba.
Luego de un período de “congelamiento”, el gobierno nacional dio su OK a dos créditos con un organismo internacional, la CAF. En el caso de esta colocación en Wall Street, los funcionarios provinciales aseguran que el respaldo nacional está acordado pero se formaliza una vez que se conoce la tasa pactada.
El método de licitación es a través del sistema de libro de órdenes, por el que los inversores envían sus ofertas a través de un sistema electrónico, permitiendo conocer la demanda del mercado y las tasas de interés que los inversores están dispuestos a aceptar.
Los road show comenzaron con la semana y el jueves podría realizarse la licitación.
Aunque la política juega, en el gobierno provincial descuentan que el aval de la Nación estará, no solo por el propio antecedente de Caba sino porque el endeudamiento de las empresas de energía y de las provincias es una de las vías más expeditivas para aumentar la oferta de dólares para sostener la tensa calma lograda en el mercado cambiario después de las elecciones.
En noviembre hubo un rally de obligaciones negociables (ONs). En apenas las primeras dos semanas las colocaciones ya rondaron los u$s 3.000 millones equivalente a todo lo emitido en 2022 y 2023.
El bono a emitir por Santa Fe tendría una duración promedio de 7,5 años y ya cuenta con la calificación internacional emitida por las calificadoras Fitch y Moody’s.
En junio pasado, la Legislatura santafesina aprobó el plan de endeudamiento por 1.000 millones de dólares que solicitó el gobierno provincial.
Durante el trámite parlamentario, se introdujeron dos modificaciones al texto original: una tiene que ver con fijar un destino para las obras que se vayan a financiar con ese endeudamiento. El 50 % para el sector productivo y el otro 50 % repartido, mitad y mitad, en infraestructura social y para infraestructura en seguridad.
La otra modificación que se introdujo en el proyecto de ley es la creación de una comisión bicameral que controlaría el uso de los recursos que se obtengan con la deuda. Estará integrada por cinco diputados y cinco senadores.
