En mi querida ciudad de Rosario todo está en emergencia, hasta nuestro comportamiento. Pero hay uno que realmente es muy preocupante. Todos los "genios", sin distinción política que se reúnen en el Palacio Vasallo toman medidas antipopulares, estúpidas y siempre para perjudicar a los rosarinos. Yo pregunto: ¿no les da vergüenza caminar por la calle cuando ven una calle inundada producto de una boca de tormenta tapada tras un chaparrón? ¿No les da vergüenza el excesivo costo del boleto? ¿No les da vergüenza la cantidad de calles en mal estado, las calles cerradas por la cantidad de corralitos de Aguas Santafesinas? ¿No les da vergüenza ver a chicos que deberían estar jugando y están pidiendo en una esquina, o vendiendo pañuelitos? ¿No les da vergüenza ver familias revolviendo los contenedores de basura? ¿No les da vergüenza el estado de los barrios? ¿No les da vergüenza la cantidad de robos, homicidios, arrebatos y demás hechos de inseguridad? ¿No les da vergüenza la cantidad de indigentes que viven en las calles y plazas? ¿No les da vergüenza el caos de tránsito diario en todos lados? ¿No les da vergüenza salir en los medios a excusarse y no hacerse cargo de nada, y siempre decir "estamos trabajando", o echarle siempre la culpa a otro? ¿No les da vergüenza aparecer cada cuatro años con soluciones mágicas y "vender humo"? La lista es larga porque seguro me olvido de algo, pero reflexiono qué feo es a veces tener que elegir entre un mal menor, y a mí eso si me da vergüenza.
El campeonato de la mentira
Se acercan las elecciones, y los políticos apoyados en una verdad absoluta, la falta de memoria y de pertenencia que es el basamento de la sociedad de pobladores de la República Argentina (porque decir ciudadanos es insultar a la palabra), dan marcha una vez más a la estafa que son las elecciones bajo el sistema electoral "representativo proporcional". Apoyados en este espurio sistema, que sólo representa a los intereses personales de los caudillos del siglo XXI, que burlan las mínimas condiciones que exige la Constitución para presentarse al electorado. El votante debería preguntarse: ¿cuéntan con el aval legal establecido en la Constitución? ¿Quién controla los electores que con su firma avalan las candidaturas? ¿Quién controla la cantidad de afiliados con que cuenta la organización política que lo presenta? Y lo máximo: ¿quién controla de dónde salen los fondos para las campañas? Es innegable que existe un cascarón llamado Justicia Electoral que con una superpoblada plantilla de empleados públicos, que ante su falta de capacidad o apañados por la seguridad de una estabilidad laboral regalada por el poder político de turno, habilitan la presunción de un sistema, aunque en realidad sean cada uno un calco del personaje representado por Francella en la película "El secreto de sus ojos". El sistema representativo proporcional es el cáncer linfático que utilizan estos universitarios fracasados en la actividad privada, que recalaron en la política con el único propósito de asegurarse el futuro. Nunca estos "políticos" reconocerán que el único sistema que habilita la representatividad ciudadana y es el uninominal. Este sistema, que desconocen hasta los parciales e ideológicos profesores universitarios, obliga al candidato a vivir en la zona donde tiene sus votantes y proporciona a estos la posibilidad de acceder al él.
Julio R. Sánchez
Macri y su enfoque de la Argentina
El país que ve el presidente Mauricio Macri indudablemente no es el mismo que ven millones de argentinos sumidos en la desesperanza por no saber qué rumbo tomar. Empleos que se pierden, fábricas que cierran o reducen su producción, pymes en riesgo de desaparecer, escasez de oportunidades para numerosas personas, inflación ascendente, endeudamiento externo. En la apertura de sesiones del Congreso, el primer mandatario argentino estuvo lejos de visibilizar la realidad de mucha gente que no la está pasando bien. Todos los indicadores de la economía le dan mal al gobierno de Cambiemos, es importante admitir que las políticas nacionales resultaron negativas para mucha gente.
Marcelo Malvestitti
Protestas por desconocimiento
Sería deseable que el municipio fijara en el interior de las unidades del servicio público calcos explicando el ahorro de unas 800 toneladas de papel, por la no emisión del boleto impreso (y la cantidad de árboles que se evitan talar), para conocimiento del viajero y su valoración. Observo protestas por desconocimiento del tema en cuestión.
DNI 6.183.536