Yo creo que estamos dando muy mala imagen ante el mundo y ante las próximas generaciones que nos sucederán. Pensemos que estamos frente a un juicio penal por denuncias hechas oportunamente y la fiscalía investiga, como es su obligación, y si lo cree conveniente acusa, o no; luego sigue el rol de la defensa y finalmente serán los jueces quiénes darán el veredicto final. Ahora, ya conocido el alegato de los fiscales, nos guste o no, ¿por qué no esperamos a ver qué es lo que dicen los abogados defensores a partir del 5/9? y sólo luego comparemos ambas posturas para sacar las conclusiones, lo más objetivamente posible, sin llegar a extremos que no le hacen bien a nadie. Ahora, en este momento y desde el llano, como ciudadanos comunes no sabemos a ciencia cierta si son inocentes o culpables, es muy pronto para opinar, por lo tanto creo que tanto “oficialistas” como “opositores” deberían calmarse y esperar un poco. ¿no les parece? Permítanme que humildemente, como un ciudadano común, les pida a mis compatriotas que dejemos de hacernos tanto daño, con un fanatismo estéril que no le hace bien a nadie. ¿Queremos o no el bien de Argentina, que es el bien de todos?