Donato de Santis estuvo el último sábado en el programa de PH, Podemos Hablar, que es conducido por Andy Kusnetzoff. ,Durante su participación en el programa, el chef reveló detalles de su dura infancia en Italia y dejó en claro que el deporte le salvó la vida, porque todos sus amigos que "robaban motos y vendían drogas" se terminaron muriendo.
En ese marco, el cocinero y jurado de MasterChef Celebrity aseguró que el deporte lo salvó de caer en esa situaciones, le evitó tener que tomar malas decisiones.
"El béisbol, el deporte, era rarísimo que lo jugaran en Italia, pero fue reintroducido en aquella época en Milán, al norte de Italia, por una familia de inmigrantes italianos que venía de Brooklyn y empezaron a reclutar chicos de la calle", comenzó relatando De Santis.
"Claro, el béisbol es rarísimo porque no se juega mucho en Italia. En aquella época fue reintroducido en el norte de Italia por una familia que inmigrantes italianos que volvieron de Brooklyn (Estados Unidos). Empezaron a reclutar chicos de la calle y armaron una liga. Era como un atractivo. ¿Por qué? Porque habían invertido una platita me imagino y tenían los bates, los guantes, te daban el uniforme, y era como algo muy 'wow'... Yo empecé a jugar, empecé a hacer un entrenamiento, a tener una actividad física de chiquito. Parece un deporte estático, pero en la parte superior tiene un entrenamiento bastante importante".
Debido a que estaba enfocado en el deporte, Donato dejó en claro que el béisbol lo obligó a no pasar tanto tiempo abocado a los robos o venta de drogas como sí lo estaban sus amigos de la infancia: "Simultáneamente, yo tenía 10 u 11 años... gran parte de mis amigos se desparramaron por cualquier lado, o sea, robando motos, vendiendo falopas, cosas clandestinas... Por la necesidad económica, empezaron a darse con todo...”.
"¿Sentís que a vos te salvó el béisbol?", preguntó Kusnetzoff, y Donato aseguró: ""Creo que sí porque yo estaba muy bien físicamente y tenía 10 años. No tenía la energía o las ganas de hacer lo que hacían ellos cuando nos juntábamos. Me contaban que vendían opium, morocco, aprendí todo esto de rebote.. Nunca toqué nada, pero ese momento fue muy fuerte".
De Santis explicó que muchos de sus amigos no corrieron la misma suerte.
"Se murieron todos, de sida que estaba tremendo en esa época, sobredosis, suicidio, asesinados por ajustes de cuentas, accidentes. Fue muy trágico, todos cayeron en la década del 80", finalizó con tristeza el chef.