Villa Constitución. — Pobladores isleños y vecinos de esta ciudad
coincidieron en advertir sobre el peligro de un desastre ecológico en la zona de islas entrerrianas
situadas frente a Villa Constitución. En ese lugar inversionistas holandeses trabajan desde hace
meses levantando terraplenes de más de cuatro metros de altura y hasta construirían canales para
vaciar lagunas existentes y explotarlo con agricultura y ganadería, según fue denunciado.
"No sé si compraron o están alquilando, pero son más de seis mil hectáreas.
Estos extranjeros trajeron dos retroexcavadoras y tres tractores, todos flamantes, y están haciendo
un movimiento de tierra gigantesco", describió un poblador isleño.
"Aquí no queda más una nutria o un carpincho ni por casualidad, y si vacían las
lagunas también va a afectar a la pesca. A eso hay que agregarle que están desmontando toda la
zona, donde había árboles autóctonos", añadió el hombre con preocupación.
El terreno en cuestión (que algunas versiones dimensionan en unas 10 mil
hectáreas) está ubicado entre los arroyos Estévez, San Lorenzo y Los Laureles, en la zona conocida
como Las Cuatro Bocas, a una media hora de navegación de Villa Constitución.
Por su parte, un vecino villense que también pidió reserva de identidad,
denunció haber sido testigo de los trabajos de la maquinaria, cuyo obrador está ubicado en el
denominado popularmente "Chalet de los alemanes".
"Hablé con algunos isleros del lugar quienes me contaron que además de estos
inmensos terraplenes están construyendo canales para vaciar las lagunas, y que después también
incorporarían grandes bombas para regar y también para sacar agua en épocas de inundación",
describió.
"Lo cierto es que toda esa actividad le está provocando un inmenso daño al
ecosistema, y por lo que pude apreciar a las autoridades entrerrianas esta situación no les importa
para nada. Bueno, si no hacen nada con los incendios menos lo van a hacer con esto, donde parece
que hay muchísimo dinero invertido", añadió.
Un pescador consultado por este diario refirió que en ese terreno ya se habría
"sembrado trigo", pero estimó que la actividad principal estaría destinada a la producción de soja
y una parte a la ganadería. "Así me dijeron los muchachos que viven por allí, pero mucho no quieren
hablar porque tienen miedo de que los echen", deslizó.
En tanto, directivos del Centro Ecologista Renacer (CER) admitieron que están en
conocimiento del tema. "Sabemos algo de lo que pasa, pero hemos cursado consultas a la ONG El
Biguá, de Entre Ríos, para que ellos se encarguen de conseguir más datos porque las islas son de
jurisdicción entrerriana", señaló Miguel Alfaro, del CER.