El proceso de transición que llevan adelante Omar Perotti y Maximiliano Pullaro entró en una zona gris y conflictiva. A pesar de que en las reuniones que se suceden entre los equipos técnicos priman la predisposición y la buena onda, en el entorno del gobernador electo observan “lentitud” a la hora de recibir la información requerida a los distintos ministerios. Por eso, para reencauzar la relación, este jueves se volverá a reunir la “mesa política” entre la administración saliente y entrante.
“La información no fluye”, comentó a La Capital un dirigente cercano a Pullaro y que ocupará un lugar en el organigrama gubernamental que está diseñando el diputado radical para cuando asuma el poder el 11 de diciembre próximo, con casi todos los nombres ya definidos.
Felipe Michlig, Gustavo Puccini y Lisandro Enrico (delegados de Pullaro) se encontrarán este jueves, a las 15, en la Casa Gris, con los funcionarios que designó Perotti para coordinar el traspaso de mando: el ministro de Gestión Pública, Marcos Corach; el titular de Trabajo, Juan Pusineri, y el senador peronista Alcides Calvo.
Paso a paso
Será el segundo encuentro de los emisarios políticos. El primero fue hace 20 días, cuando se inició formalmente la transición, que dio paso luego a una serie de reuniones entre los equipos técnicos y los titulares de todas las áreas de gobierno. Ese proceso siguió este martes en la capital provincial con la EPE, Aguas Santafesinas y la Dirección de Comunicación.
Michlig, el senador por San Cristóbal y probable ministro de Gobierno en la gestión Pullaro, confirmó la reunión del jueves en la Casa Gris. El legislador radical calificó como “normal” el proceso de transición y adelantó que el encuentro con los delegados de Perotti servirá para realizar un “balance” de todo lo actuado hasta ahora.
“Venimos intercambiando opiniones. El balance es normal, pero faltan algunas cuestiones”, agregó Michlig, y dijo que en la próxima reunión volverán a plantear el tema de las últimas designaciones que hizo Perotti, en especial en el área de Justicia, con “nombramientos de funcionarios políticos” en juzgados comunitarios.
Michlig fue cauto cuando este diario lo consultó sobre las expectativas y los resultados concretos que muestra hasta ahora la transición. “Normal, normal”, repitió varias veces el senador.
De muy buena fuente, La Capital pudo saber que Pullaro instruyó a sus delegados políticos para que traten por todos los medios de reencauzar y optimizar la transición. Pesa en la memoria el traspaso de mando entre Perotti y el socialista Miguel Lifschitz, que fue traumático y dejó heridas profundas en ambos lados.
También observa un clima social hipersensible, con problemas en la seguridad y una inflación indomable que carcome los bolsillos, como para agregarle a la ciudadanía una nueva tensión política.
“Maxi cree que la sociedad no está para ver a los políticos peleándose. Por eso pidió la reunión para este jueves”, aseguró el vocero pullarista.