Una masiva marcha organizada por movimientos sociales y barriales reclamó ayer en Rosario que se declare la emergencia social y laboral. La movilización buscó exponer el reclamo frente al aumento de la desocupación y la pobreza que se registra en la región.
El sacerdote Claudio Castricone, uno de los referentes de la movida de numerosas organizaciones sociales, señaló que "la exclusión es la principal causa de todo tipo de marginalidad", al tiempo que destacó que "no es casualidad que la capital de la inseguridad sea también la capital de la desocupación" en el país.
"Marchamos para que se declare en la ciudad, pero sería interesante también en la provincia y la Nación, la emergencia social y laboral por la desocupación, los despidos y la falta de trabajo, porque el poder adquisitivo bajó el 8 por ciento en lo que va del año, por más que ahora la inflación haya bajado, pero lo que se perdió... se perdió".
La movilización partió de plaza San Martín y fue hasta el Monumento a la Bandera. Entre las organizaciones convocantes estaban la Corriente Clasista y Combativa (CCC), el padre Claudio Castricone (sacerdote villero), el pastor Santiago Bauer (Iglesia Luterana), la Agrupaciones de Base Social Movimiento Libertador San Martín, el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), Barrios de Pie, el Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos (Medh), la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (Apdh) y la Red Antimafia.
"Casi 150 asentamientos irregulares son el testimonio de una realidad social que lastima; sin embargo no hay en Santa Fe ni un programa de empleo verdadero, ni nacional ni provincial; el programa nacional Argentina Trabaja (que el gobierno anterior nunca mandó) sigue sin aparecer", expresaron en un comunicado.
"Pedimos trabajo genuino y planes nacionales que no llegan a Santa Fe, como Argentina Trabaja. Necesitamos medidas sociales en medio de la discusión por más seguridad", dijo la diputada provincial por el Frente Social y Popular Mercedes Meier.
"Queremos respuestas masivas para el hambre y la desocupación, el cese de despidos, planes de vivienda, reapertura de la paritaria, 82 por ciento móvil para los jubilados, por una salida a favor del pueblo, sin volver para atrás", expresaron los convocantes.
También denunciaron las políticas de criminalización y judicialización de la protesta social, el avance contra las libertades democráticas y el despliegue represivo.