“Yo siempre cumplo lo que prometo. Gracias a mí no viene Fideo”, fue el mensaje que Alejandro Nicolás “Rengo” Ficcadenti (30 años), quien pretendía ser el líder de la barra de Newell’s le envió a un amigo. Era un blasón, una chapa indiscutible. Había evitado por medio de un atentado y distintas amenazas que el campeón del mundo Ángel Di María no siguiera especulando con su regreso a uno de los clubes que lo acunó, Rosario Central y no viniera a Rosario a jugar en el Canalla. Tanto Ficcadenti como su amigo de la barra, Sergio Gabriel “Bebe” Di Vanni (43), fueron imputados en la mañana de este viernes por el fiscal Pablo Socca por haber instigado la intimidación que sufrió el pasado 25 de marzo la familia de Di María en inmediaciones del country de Funes Hills Miraflores. Así, el juez Nicolás Pinto determinó la prisión preventiva para los dos por el término de dos años, como lo marca el plazo de ley.
El fiscal argumentó ante el juez que Ficcadenti ordenó a Di Vanni la ejecución del atentado y le prometió una paga de cuatro millones de pesos. “Bebe” fue quien se encargó de convocar para el ataque a dos conocidos: Pablo Ezequiel Acotto (35), quien contactó a su prima Sara Belén Gutiérrez (23). Debían disparar un par de tiros para llamar la atención de los guardias del country y dejar una nota intimidatoria.
El 27 de marzo pasado, a las 3, la Policía Federal Argentina interceptó a Acotto y Gutiérrez en un departamento temporario alquilado en pleno centro de Rosario. Se habían “refugiado” en ese lugar, lejos de donde viven, en la localidad de Pérez, luego de que el municipio de Funes difundiera por los medios las imágenes que los mostraban en un Renault Megane en el momento de las amenazas. Esa madrugada la PFA también encontró el vehículo, al que ellos habían intentado prender fuego. A partir de la investigación los pesquisas presumen que Acotto se quedó con buena parte de la paga y entregó 100 mil pesos a Gutiérrez solo por acompañarlo.
En tanto Fiscalía les atribuyó a Ficcadenti y Di Vanni, ambos pertenecientes a una facción disidente de la actual barra brava de Newell's, organizar y planificar el atentado. Así, pocos días antes, el 22 de marzo, desde su celular Di Vanni le indicó Acotto mediante un mensaje de WhatsApp que el domingo o lunes debían realizar el atentado y le indicó la hora aproximada; “para que salga en el noticiero”. Luego del hecho, el 26 de marzo, Acotto le escribió a Di Vanni: “Hermano, fue un éxito. Desistió”_ se refería a que Di maría no jugaría en Central.
Amenaza a Di María
Para la Fiscalía, “el hecho cometido tuvo el objetivo de impedir que el jugador decida regresar del exterior a jugar en el club de fútbol rival, y de esa manera Ficcadenti utilizar ese logro como plataforma para ganar consenso entre sus seguidores y así posteriormente intentar -con el apoyo y el aval de Ariel Cantero- tomar el liderazgo de la barra. Además, se buscó infundir temor y generar conmoción en la población, evidenciado la selección de la víctima como blanco del ataque y la mención en la nota al gobernador Maximiliano Pullaro. En esos días la ciudad sufrió tiroteos a instituciones; homicidios y todo tipo de ataques, los que se adjudicaban a internos de alto perfil alojados en diferentes unidades penitenciarias que buscaban mejorar sus condiciones."
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Fiscalía en su momento manejó dos hipótesis, que Ficcadenti podía apuntar, a través del atentado, a hacer pública una situación carcelaria difícil por la que pasaba Cantero, quien estaba "engomado” e incomunicado, que por medio de la fama de Di María se haría público y el hecho significaría una presión política.
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Adiós. Di María se despidió de la selección argentina y por el momento de la posibilidad de volver a Central.
AP
La segunda hipótesis es que se buscaba que Di María no volviera a Rosario. Con el correr de la investigación las dos hipótesis fueron una; “Ficcadenti mataba dos pájaros de un tiro; por un lado se arrogaba frente a la barra que Di María no jugara en Central y por el otro quedaba bien con Guille Cantero exponiendo su situación, políticamente estupendo", aseguraron fuentes de Fiscalía. También se presume que el dinero, los cuatro millones, era de Ficcadenti ya que al ser capturado manejaba una banda de venta de estupefacientes en zona oeste.
El fiscal Socca mostró en la audiencia un mensaje en el que Ficcadenti se atribuye la decisión de Di María de no volver a Central. Uno de los mensajes fue enviado el 15 de julio, cuando a otro usuario le escribió: “Yo siempre cumplo lo que prometo. Gracias a mí no viene Fideo”. En otro WhatsApp, el 21 de julio y dos días antes de que Newell’s recibiera en el Coloso a Independiente de Rivadavia, le comentó a un contacto: “Dense cuenta por qué no viene Di María, gracias a quién, y quién siempre le hizo la guerra a los Sina, quién les prendió fuego la sede. El martes vamos a estar nosotros en la cancha”.
El último mensaje daba cuenta de la intención del “Rengo” de contar con la medalla del ataque a la familia de Di María para asumirse como el nuevo líder de la barra y desplazar al actual jefe, Luciano “Lucho” G., un hombre cercano a Leandro “Pollo” Vinardi, actualmente preso en el penal federal de Ezeiza e histórico ladero de Ariel Máximo “Guille” Cantero, el mandamás de Los Monos.
Casualmente, “Lucho” G. e Ivana B., pareja de “Pollo” Vinardi, fueron detenidos este viernes por orden del fiscal Franco Carbone por estar sospechados de haber participado en la balacera ocurrida el viernes de la semana pasada contra la casa de Fernanda C., una vocal que integra la actual comisión directiva rojinegra.
Durante la audiencia se escuchó una comunicación telefónica entre Cantero y Ficcadenti en el cual Guille le comenta: “Ahora la barra la maneja una chica jaja, altos zapallos son ustedes. Tienen que ir a votación compadre, ya no queremos más chicas, queremos unos barras buenos. No tienen ni barra ustedes, hermano. Ni siquiera pelean. Una chica lo maneja, hermano, ¿cómo puede ser?” En la misma comunicación se refieren a un tal "Colo" que armaba la tribuna y la bandera. Según explicó Socca, la alusión de “Guille” era a que actualmente “Lucho” G. lideraba la barra junto con Ivana B., la pareja del “Pollo” Vinardi.