"Me pasearon como 30 cuadras y estuve encerrado en mi auto como una hora y media. La verdad, no sé qué querían. No me creían que no tenía plata". Daniel contaba su pesar mientras limpiaba la Renault Trafic en que lo cargaron la medianoche del miércoles, cuando llegaba a su casa de zona sur luego de comer un asado. El hombre fue sorprendido por tres ladrones que lo golpearon en las costillas y lo metieron dentro de su casa para robarle un televisor LCD, un radiograbador y una carabina calibre 22. "A mi me metieron en la Trafic atado de pies y manos con cordones. Dos de ellos entraron a la casa y fueron hasta la habitación de mi suegra buscando plata. La verdad es que no sé qué pensar", relató el hombre mientras miraba un rayón que le hicieron al vehículo.
Pero los ladrones no contaban con que una vecina vio como subían a Daniel al utilitario y llamó al 911 para suministrar la patente del vehículo, lo que facilitó que efectivos del Comando Radioeléctrico hallaran el utilitario pasadas las 3.30 en Benito Juárez y Ayacucho, a unas 15 cuadras de la casa asaltada. "Lo único que veía era que se comunicaban mucho por celular (haciendo el gesto de que se enviaban mensaje de texto o de WhatsApp). Después me quedé quieto en el piso de la Trafic, a ver si pensaban que quería hacerme el loco y me pegaban un balazo", recordó la víctima.
Cuando la policía dio con la Trafic al volante estaba Jorge Carlos Rosales, de 55 años, sobre quien pesaban dos pedidos de captura emitidos por el Juzgado de Ejecución Penal de Rosario en 2011 por no haber regresado a prisión tras una salida transitoria.
El miércoles a la noche Daniel comió un asado con amigos y en los primeros minutos de ayer regresó a su casa de Sánchez de Bustamante al 200, en Saladillo, y estacionó frente a la vivienda la Trafic blanca con la que realiza traslados para la clínica psiquiátrica "Sagrado Corazón de María" de la que es encargado. Cuando estaba por abrir la puerta fue sorprendido por tres hombres que "salieron de atrás del volquete (ubicado sobre la vereda, a 5 metros de su casa) y me golpearon. Me sacaron las llaves de la casa y de la Trafic. Se metieron en la casa. «Vos tenés plata», me dijeron. Les dije que no. «Tu suegra la tiene». Les repetí que no. Subieron la Trafic a la vereda y la colocaron al lado de la puerta de la casa, como para cargar todo lo que encontraran. A mí me ataron de pies y manos con cordones de zapatillas y me metieron en el auto", rememoró.
Dos de los ladrones ingresaron a la casa y fueron a la habitación de la suegra de Daniel, de 72 años, pensando que la mujer tenía dinero. Pero omitieron que en la vivienda estaba una hija de Daniel, que se enteró del robo una vez que los ladrones se fueron. "Yo estaba mirando la tele en mi habitación y me enteré de lo que había pasado cuando mi abuela me golpeó la puerta. Entonces llamé a la policía", recordó la joven. "La policía se portó rebien. En dos minutos estaban en casa. Nos dijeron que los ladrones actuaron con guantes porque no había una sóla huella y por lo que me cuenta mi abuela estuvieron como una hora adentro", explicó la chica.
Escape y caída
Una vez que los ladrones se dieron cuenta que no había dinero hicieron un último intentó con Daniel. "Me dijeron: «Aflojame dos lucas y nos vamos». Yo les dije que no tenía dos lucas", confió el hombre. Los maleantes cargaron en el furgón el tele, el radiograbador, la carabina en su estuche y a Daniel, atado de pies y manos. "Me pasearon como unas 30 cuadras. Yo no me levantaba del piso porque pensaba que me iban a disparar, pero no salimos de zona sur porque pasamos por muchas lomas de burro", comentó. "Ellos me llevaban pero nunca me decían hacia dónde o porqué. Siempre se comunicaban por celular y me pareció a mi que había un auto de apoyo", contó.
El llamado al 911 activó un protocolo de seguridad que se tradujo en un operativo cerrojo en zona sur. Pasadas las 3.30, un móvil del Comando dio con la Trafic estacionada en Benito Juárez y Ayacucho. "Los policías le preguntaron qué hacía ahí. El chofer le dijo que esperaba a su novia. Uno de los policías miró con su linterna el interior del furgón y vio el televisor y las demás cosas. Entonces lo detuvieron. Cuando abrieron la puerta trasera se encontraron conmigo. Yo estaba callado. Tenía miedo que se pensara que me hacía el loco y me disparara", confió Daniel, quien logró recuperar lo que le habían robado. La investigación de lo sucedido quedó en manos del fiscal Rodrigo Urruticochea de la unidad de Flagrancia.
En Villa G. Gálvez
Raúl y Luisa sufrieron un violento robo poco después de las 3 de ayer en su casa de Villa Gobernador Gálvez. "Fue espantoso, estábamos durmiendo, prenden la luz y te encontrás con un tipo armado y encapuchado enfrente", recordó Raúl, de 84 años. El intruso entró tras forzar las rejas del patio y golpeó con su arma en la cabeza al hombre provocándole un profundo corte en el cuero cabelludo. Tras ello revisó toda la casa y se alzó con las jubilaciones de los ancianos y dinero que tenían para pagar impuestos antes de huir.