Un hombre de unos 30 años fue baleado ayer a la mañana en la puerta de un after de la zona oeste donde poco más de un año atrás fue asesinado un joven (ver abajo). Según los primeros datos aportados por fuentes judiciales, la víctima pasaba por el lugar en su moto cuando quedó en medio de un tiroteo y un impacto de bala le provocó una fractura de fémur.
Si bien al cierre de esta edición no se habían establecidos los motivos ni las circunstancias del incidente, ni se había identificado al autor del disparo, no descartaba que se haya tratado de una gresca entre bandas. En tanto, el local que no tiene nombre visible en la fachada, exhibía ayer al mediodía una faja de clausura mientras personal de la Policía de Investigaciones (PDI) y la comisaría 6ª levantaban rastros y recababan testimonios a las órdenes de la fiscal de turno en feria Karina Bartocci.
Según vecinos consultados en la zona por este diario, el violento episodio ocurrió minutos antes de la 6 frente a un bar de Avellaneda 1168, entre Mendoza y la cortada Marcos Paz. Si bien las fuentes allegadas al hecho no indicaron cuál fue el origen de los hechos, una versión indicaba que en el lugar hubo una pelea en la cual un hombre le pegó un botellazo en la cabeza a otro. Entonces, mientras los encargados de la seguridad sacaban al agresor a la calle, un amigo del herido fue hasta su auto, sacó un arma de fuego y comenzó a disparar.
Lo cierto es que de la balacera resultó víctima un hombre de unos 30 años al que fuentes policiales identificaron como Santiago V. Voceros allegados a la investigación indicaron que el hombre pasaba por el lugar en una moto cuando fue alcanzado por un proyectil en una pierna. Asimismo, otra versión indicaba que el muchacho, que fue trasladado primero al Hospital Carrasco y luego al Heca, estaba estacionando su vehículo en el lugar.
"Yo entré a mi casa a las 5.45 y dos minutos después escuché como doce disparos. No sé qué pasó porque en la calle sólo vi a dos pibes meando, no había nadie más", comentó un vecino de la cuadra que sostuvo que ese tipo de incidentes son recurrentes en un local que por estos días "abre a las 4 y cierra a las 10".
"Cuando escuché un griterío fuerte me imaginé que iba a pasar algo grave", añadió una joven que también reside en la zona. En esa línea, otros vecinos consultados —ninguno quería identificarse por miedo a represalias— sostuvieron que las peleas entre borrachos son habituales en la puerta del bar al mismo tiempo en que vecinos de la zona asisten a misa a una parroquia cercana o desayunan en los bares de la zona.
"Hay proveedores de la rotisería que está al lado de ese after que los domingos a la mañana ya no quieren venir. O si no esperan hasta que se hagan las 11 para ir", deslizó otro vecino.
Un homicidio
La mañana del 6 de diciembre de 2015 un joven de 19 años fue asesinado de un tiro cuando salía del bar de Avellaneda al 1100, que entonces se llamaba Newton y había reabierto una semana antes tras una clausura. En el incidente fue baleado otro joven de 23 años.
Al parecer, el agresor esperaba a Gonza en la puerta del local y cuando lo vio salir le dijo "vos sos el que te peleaste conmigo" antes de comenzar a dispararle. El chico intentó huir a la carrera pero cayó en Río de Janeiro y Mendoza. Desde allí lo trasladaron al Heca, donde murió a raíz de la sangre que había perdido por el balazo que le perforó la arteria femoral.