La reacción de Newell’s se demoró más de un tiempo. Y encima resultó ineficaz para evitar la victoria de Defensa y Justicia, por la cual hizo muy pocos méritos. Es que apenas por la efectividad en un tiro libre dejó al conjunto rojinegro sin nada. Amarga entonces por donde se la mira esta caída para la lepra en Florencio Varela. Que termina siendo un paso atrás en este ciclo de Gabriel Heinze que recién comienza. Ni más ni menos que eso. Para no hacer drama, pero para tomar nota. Porque regalar puntos de esta manera es frustrante.
Y eso que las primeras aproximaciones fueron de Newell’s. Y de enorme riesgo, aprovechando las dudas del fondo local. Apenas a segundos del inicio del partido, Iván Gómez se anticipó, cortó en tres cuartos de cancha y el remate de Portillo, no del todo preciso y tampoco potente, quedó en las manos de Unsain. La siguiente desinteligencia del halcón de Varela fue en un tiro de esquina lanzado por Sordo. Velázquez apareció muy solo en el área y el cabezazo fue interceptado por el exarquero rojinegro.
Al margen de estas primeras situaciones, a los dos les costó igualmente ser prolijos a medida que atravesaban la línea media. Morían en las intenciones. Así y todo, el conjunto rojinegro lucía más compacto, procurando tener profundidad por las bandas. Desde un desborde de Pittón, Reasco quedó de frente al arco para convertir, pero se encontró con el pie salvador de Cardona.
Defensa y Justicia no inquietaba. Uvita Fernández, movedizo, retrocedía y trataba de generar algo. Cerca del área rojinegra no podía nada. Velázquez no lo dejaba. Hoyos permanecía tranquilo. Hasta la innecesaria falta de Mosquera a Solari cerca de la medialuna. Kevin Gutiérrez la acarició en el tiro libre y la puso arriba, inalcanzable para el uno rojinegro.
Newell’s lo perdía en la única que le llegaron. Y desde ese momento profundizó la falta de fútbol. Las corridas de Sordo, con más decisión que efectividad, fueron la única esperanza de llegar al empate. Propio de un partido chato, sin luces, en el que Defensa, ahora algo más suelto adelante, tuvo ciertas ocasiones para aumentar.
No fue posible por las atajadas de Hoyos. Primero al tiro desde media distancia de Fernández. Y en el cierre de la primera etapa, con una doble intervención, a Solari y a Fernández a metros suyo.
La falta de juego en el medio obligó a Newell’s a saltar la mitad de la cancha. Los lanzamientos largos, más enviados por falta de recursos que por convicción, no resultaban nada provechosos, con el receptor obligado a pelear pelotas divididas.
Era urgente una reacción y Heinze no demoró en mover el banco. Mandó a la cancha a Ferreira y Recalde por Portillo y Reasco, además de Mansilla por Velázquez. El revulsivo tuvo efecto. Newell’s pisó con mayor decisión campo contrario. Unos minutos después metió a Pablo Pérez por Mosquera.
Newell’s empezó a merodear con frecuencia el área del halcón. Ferreira, participativo, tocaba rápido y bien. Recalde obligaba a los zagueros rivales a estar
muy atentos. Gómez, ahora de lateral derecho, pasaba con decisión al ataque, llegaba y hasta probaba al arco.
La deslucida imagen previa a las variantes trastocó. No lo necesario para alcanzar la igualdad. Un remate del ingresado Aguirre exigió a Unsain. No mucho más.
Eso sí, en igual cantidad de ocasiones, si no más que Defensa. Que al fin y al cabo se lo ganó por un tiro libre. Lo que jugó Newell’s en la última media hora será el modelo a repetir. Durante más tiempo y con mayor agresividad, para que no haya frustraciones como las de Florencio Varela.
¡EL HALCÓN SUPERÓ A LA LEPRA DE HEINZE EN VARELA! | Defensa y Justicia 1-0 Newell's | RESUMEN