Cada vez que empieza un campeonato de fútbol internacional, en este caso la Copa América, los canales de televisión y las empresas más importantes del país se esfuerzan por lanzar los comerciales más creativos que emocionen, hagan reír e ilusionen a los argentinos con el torneo que se viene.
A diez días del inicio de la Copa América, TyC Sports lanzó su ingeniosa propaganda que refuta a los chistes sobre argentinos que usualmente despliegan los hermanos latinoamericanos. Antes Coca Cola había primereado con la publicidad sobre el cocacolero que se inicia en Chaco for Ever y después de recorrer el mundo decide volver a su primer amor.
A poco de iniciarse un nuevo torneo de fútbol LaCapital.com.ar eligió las publicidades sobre la selección argentina que más emocionaron a los argentinos:
1- Maradona duende: En 2002 cuando los partidos se jugaban a la madrugada en Japón y Corea, Diego protagonizó un comercial en el cual recorría la ciudad en penumbras jugando al ringraje y despertando a los argentinos para ver el mundial.
2- Los habilidosos: En 2006, con la música inolvidable del Mundial Italia '90, se mezclan las imágenes de distintos potreros y canchas del país en la que cada hombre entrena y gambetea como si estuviese por jugar la final del mundo. Desopilante.
3- En tu cabeza hay un gol: En 1998 llegaba el Mundial de Francia y otra vez la ilusión se acrecentaba con esta publicidad que aún se escucha en los boliches. Imágenes de los hinchas de todos los equipos del país viviendo la emoción máxima que tiene el fútbol: el gol.
4- Siamo Fuori della Copa: Después del Mundial 90, la ingeniosa publicidad rescata una idea propia de un argentino, que es mostrar como los periodistas de otros países relatan la derrota de sus equipos ante Argentina. La frase “Siamo fuori della copa, un giorno tristíssimo”, sigue siendo utilizada para cada eliminación de cualquier equipo y hasta se convirtió en marcas de ropa.
5- Argentinos: Antes del Mundial de Sudáfrica y con el boom de las redes sociales, esta publicidad recorrió el mundo acrecentando el mito de la pasión que despierta el fútbol en Argentina, dónde los jufgadores juegan con el corazón, y no salen si pierden el partido, además de recordar el tobillo de Maradona que parecía "un cuello" y los miles de papelitos que se tiran cuando sale el equipo.