Central y Newell’s arrancaron esta temporada con algunas cuestiones muy claras en cuanto a lo que será la estructura de los respectivos equipos. Porque tanto el DT canalla Diego Cocca como el conductor leproso Frank Darío Kudelka priorizaron a la hora de ensamblar a sus alineaciones implementar una columna vertebral de experiencia y jerarquía, que sostenga al resto de la estructura. En este aspecto, el esqueleto funcional de auriazules y rojinegros es similar en cuanto a las características de los jugadores que ocupan las posiciones clave de la cancha, siempre haciendo la salvedad de que las comparaciones suelen ser odiosas y que la intención no es decir si un jugador es mejor que el otro del clásico rival. Lo que está claro es que el eje del medio de los equipos rosarinos, salvo alguna cuestión puntual, asoma como intocable y que servirá de guía para que engrane el resto de los componentes del once inicial. Tanto en Arroyito como en el Parque se puede decir entonces que en ambos casos “la base está”.
No hay ninguna duda de que lo que se juegan los equipos de la ciudad en esta temporada en referencia al promedio incide en esta búsqueda de “garantías” posicionales que intentan sostener ambos entrenadores. No es el tiempo de hacer experimentos ni ensayar con futbolistas sin rodaje en los sectores neurálgicos de la cancha. Porque Central y Newell’s no tienen margen de error y necesitan armar equipos compactos, donde sus figuras estelares asuman el rol de líderes en cada una de las líneas. Esto lo saben mejor que nadie Kudelka y Cocca y al menos así lo están demostrando en el inicio de la competencia.
Por el lado de Central, uno de los líderes de la flamante Superliga, en la que atesora seis puntos producto de los triunfos ante Atlético Tucumán 2 a 1 y Talleres 1 a 0, Cocca va camino a sostener una columna vertebral que pronto será inamovible. Aquí hay varias piezas que ya tienen continuidad en Arroyito y saben muy bien lo que significa ponerse la camiseta canalla. Está el caso de Jeremías Ledesma (26 años) bajo los tres palos. Un arquero que se afianzó notablemente y es uno de los pilares del equipo. Claro que lo miran otros equipos y tarde o temprano va a emigrar.
Otro pilar trascendente de la estructura canalla es el zaguero Matías Caruzzo (34 años), que además de ser una garantía en la cueva es el principal ordenador de sus compañeros a la hora del retroceso. Caruzzo es uno de los mejores zagueros de fútbol argentino y arrancó en gran nivel la actual Superliga. Mientras que como volante tapón está Fabián Rinaudo (32 años), que es el encargado de compensar al equipo y hostigar a todos los rivales que intentan progresar rumbo al área auriazul. Luce muy dinámico en el inicio del certamen.
En tanto, el encargado de la generación de juego es Leonardo Gil (28 años), como un volante interno adelantado, de auspicioso inicio de torneo con gol incluido ante los tucumanos. Y como delantero de experiencia y por el que el canalla hizo un gran esfuerzo económico (aproximadamente desembolsó 1.500.000 dólares) sobre el cierre del libro de pases hay que mencionar a Lucas Gamba (32 años). Recién debutó en la segunda fecha y fue decisivo cuando ingresó en el segundo tiempo en la jugada del gol de Diego Zabala.
Se podría decir, siempre con los altibajos lógicos que pueden tener los jugadores, que esta es la médula del equipo que tiene en mente sostener Cocca a lo largo de la Superliga que recién comienza. El único que no estaba en Central es el atacante Gamba.
En la vereda de enfrente, Newell’s arrancó venciendo 2 a 0 a Central Córdoba de Santiago del Estero en el Coloso, con goles de Alexis Rodríguez y Lucas Albertengo. Luego se postergó el duelo ante Independiente. El modelo que está tratando de consolidar Kudelka incluye nombres propios con rodaje y recorrido confiable. De atrás hacia adelante, Alan Aguerre (28 años) fue uno de los mejores arqueros de la pasada Superliga y es una pieza vital. Si bien el arquero rojinegro sufrió un esguince de tobillo y está en duda para el cotejo ante Unión (ver páginas 6 y 7), está claro que su aporte es valioso por la tranquilidad y solvencia que transmite bajo los tres palos.
En la defensa la voz de mando y el oportunismo para neutralizar a los atacantes rivales lo aporta el refuerzo Santiago Gentiletti (34 años). Es un zaguero de sobrada experiencia que Kudelka no dudó en sumar para que lidere la última línea. El cinco clásico de contención es Julián Fernández (24 años), que llegó de Palestino de Chile y en el primer cotejo ante los santiagueños fue la figura de la cancha por el despliegue y la ubicación para ganar los rebotes.
El volante interno encargado de ser la usina de fútbol es Mauro Formica (31 años), un futbolista que cuando logra imponer su talento, juega y hace jugar a sus compañeros. Y no hay dudas de que en la ofensiva Maximiliano Rodríguez (38 años) es el jugador de mayor jerarquía y preponderancia del plantel leproso. Con tres mundiales en el lomo, Maxi (que arrastra una fatiga muscular) es el gran referente del Parque y uno de los futbolistas con mayor categoría de los que actúan en la Superliga.
De esta manera, tanto leprosos como canallas cuentan con un eje medio integrado por futbolistas para nada improvisados, que serán la base de los respectivos equipos en la titánica misión de remontar el promedio. Central y Newell’s son conscientes que juegan un torneo aparte con los equipos que integran la zona baja de los promedios y no pueden fallar. Y es lógico, tal cual lo piensan Kudelka y Cocca, que el peso anímico y la responsabilidad futbolística recaiga especialmente en los jugadores con mayor rodaje que tienen en sus respectivos planteles y que ellos ocupen la columna vertebral de las alineaciones.
Además los planteles cuentan con otros jugadores fundamentales para la cruzada por la permanencia, más allá del aporte que pueden hacer los juveniles de las respectivas canteras. En Central, entre otros, son los casos de Miguel Barbieri, Ciro Rius, Diego Zabala, Sebastián Ribas o el propio Néstor Ortigoza que hoy la pelea desde atrás.
Mientras que en Newell’s, entre otros, también tienen preponderancia los aportes de Cristian Lema, Mariano Bíttolo, Lucas Albertengo y Rodrigo Salinas.
Con soldados confiables, tanto Kudelka como Cocca, buscan cerrar filas en pos de armar equipos compactos, aguerridos y que pongan el interés colectivo por sobre el lucimiento individual. Eso evidenciaron Newell’s y Central en el inicio de la Superliga y buscarán afianzarlo y mejorarlo a medida que avance la temporada.