La norma que el Concejo Municipal aprobó por unanimidad el 21 de abril último para instrumentar estrategias preventivas en las fiestas electrónicas, entre ellas el testeo in situ de pastillas de drogas sintéticas, como el éxtasis, nunca llegó a aplicarse en Rosario. La negativa a firmar el convenio con el Centro de Estudios Avanzados en Drogadependencias y Sida (Ceads, UNR), que trabaja con el paradigma de reducción de daños, provino de la propia Intendencia. En ese momento, el secretario de Salud Pública, Leonardo Caruana, sostuvo que se garantizarían "ambientes seguros, asesoramiento e información para los asistentes", así como "espacios de hidratación", pero a la vez descartó el "testeo in situ". Lo cierto es que el acuerdo nunca se firmó.
"Pero vamos a insistir, junto a Carlos Comi, para pedirle al Ejecutivo que implemente la ordenanza", afirmó ayer la presidenta del cuerpo y autora de la iniciativa, la radical Daniela León.
En una nota publicada también ayer en LaCapital, la titular del Ceads, Silvia Inchaurraga, recordó que el proyecto suponía celebrar un convenio para avanzar en "estrategias de intervención en reducción de daños, asesorar sobre dispositivos de salud en eventos, realizar un relevamiento en terreno sobre drogas de consumo en fiestas electrónicas y realizar una experiencia piloto en la ciudad" que permitiera contar con los "datos necesarios" como para elaborar un "mapa de consumo y riesgos".
Lo cierto es que el tema ganó las portadas de los medios nacionales, generó fuerte polémica y en Rosario el acuerdo nunca se suscribió.
Sin avances
"La ordenanza no fue vetada, pero en los hechos Salud Pública no firmó el convenio con el Ceads, pese a que hubo una reunión entre sus autoridades, de la que incluso participé. Y aunque quedaron en volver a encontrarse, no hubo más avances", reconoció León.
La edila aclaró que la propuesta de reducción de daños contemplaba "varias estrategias", algunas de las cuales "sí se aplicaron". De todos modos, coincidió con Inchaurraga en que "no se puede negar la realidad" e insistió con la idea de realizar controles in situ de las sustancias de consumo, aun "cuando el consenso de la mayoría difiera" de esa alternativa.
León recordó que para elaborar su proyecto se basó en una "recomendación" que la Organización Mundial de la Salud (OMS) "hizo a los gobiernos para que apelaran a la reducción de daños".
Y en cuanto al testeo de sustancias, afirmó incluso que no sólo podría realizarse en inmediaciones de fiestas electrónicas, que fue la propuesta que cobró mayor espectacularidad, sino en los decomisos que realizan las fuerzas de seguridad. "Así podríamos saber un poco mejor de qué droga se trata y qué se está consumiendo, sobre todo al tratarse de drogas sintéticas", y así "poder actuar en consecuencia".
La radical prometió volver a la carga junto a Comi para "solicitar al Ejecutivo que implemente su proyecto aprobado".
a todo ritmo. El festival de música electrónica realizado en el acceso a Arroyo Seco.