Con la expectativa de que esta misma semana se abra el debate sobre la redistribución de los subsidios al transporte urbano en el Congreso, el intendente Pablo Javkin insistió en la previa a la reunión con su par de la capital provincial, Emilio Jatón, y los legisladores nacionales por Santa Fe, que "este es un tema que nos tiene que unificar" e incluso anticipó que durante el encuentro la idea es "ver como se materializan" algunas propuestas concretas.
El cónclave comenzó a media mañana de este lunes en la Estación Belgrano, de la capital provincial, donde no solo estuvieron los intendentes, sino además los legisladores nacionales santafesinos de todo el arco político para avanzar en la redistribución de los subsidios que las ciudades del interior del país vienen exigiendo a la Nación, como ya se hizo con el intendente de Córdoba.
"Muchos de los legisladores tienen proyectos, se han presentado varios proyectos y producto de eso buscamos lograr mayor equidad en el reparto de subsidios", dijo minutos antes de entrar al encuentro el intendente rosarino.
Si bien reconoció "algunas medidas que se están dando en función de hacer más equitativo el reparto y salir del 85/15 que hay actualmente", el titular del Palacio de los Leones remarcó la necesidad de "coordinar todo lo que tiene que ver con el transporte urbano con los tres intendentes del interior, como lo hicimos ya con Córdoba, porque este es un tema que nos tienen que unificar".
"A veces, la Argentina tiene divisiones ficticias y la del transporte es una situación real del interior del país", continuó Javkin que entró al encuentro con todos los legisladores santafesinos con la idea justamente de "analizar como se materializan ideas" y con la expectativa de que "esta semana empiece el debate en el Congreso Nacional".
El lobby del interior
La idea de los intendentes de Rosario y Santa Fe es continuar con este encuentro es seguir presionando para que el reparto de los fondos que Nación asigna al sistema sea más equitativo, en el marco de una crisis que golpea a los servicios públicos de pasajeros de las ciudades más importantes del interior del país.
El objetivo es continuar el lobby para salvar el transporte del interior, que vive una preocupante situación con muchas dificultades para mantener un servicio sin interrupciones. Las constantes demoras en la llegada de fondos, y la exigüidad de los mismos, con un Área Metropolitana de Buenos Aires (Amba) que se lleva el 89 por ciento de las asignaciones, y tan solo 11 queda para el resto del país, lo que ha provocado paros y amenazas de huelga por parte de los gremios de conductores casi todos los meses en los últimos tiempos.
Es más, la semana pasada fue el secretario de Transporte de la Nación, Diego Giuliano, quien salió a poner paños fríos ante la posibilidad de un eventual paro de colectivos que se había anunciado si este lunes no llegaban subsidios con los que se debería afrontar el pago del aumento salarial que consiguieron los colectiveros nucleados en la Unión Tranviarios Automotor (UTA). Es que tras una larga lucha, los choferes lograron que se equiparen sus salarios con los de sus pares del Amba, pero para poder hacer frente a ese logro gremial es clave la llegada de fondos nacionales.